De antemano les pedimos una disculpa a nuestros queridos lectores. Sabemos que los lunes por la mañana el estado de ánimo no es el mejor, y por eso, comprendemos que al publicar notas como ésta podemos sumirlos más en la incertidumbre. Y es que llegó el turno de hablar de hipsters.
Sí, los hispters, esa especie de subcultura que desde hace un par de años ha ido apoderándose de la humanidad, haciendo que toparnos con estos personajes sea cada vez sea más común en fiestas, museos, mercados de comida de la colonia Roma, bazares de ropa ‘de diseñadooooor göey”, parques de la Condechi, comprando cafés de la Sirenita, y sitios por el estilo.
Una de las características más representativas del hipster, es su vestimenta y si bien, en Sopitas.com somos muy respetuosos con el estilo de vida de todos, también estamos convencidos de que hay atuendos hipster que atentan contra las pupilas del resto de la sociedad; moda que únicamente resulta cool para quién la usa o para los de su misma estirpe, pero que al resto de las personas nos hace desear que el mundo se hubiera terminado en el 2012.
Aquí unos ejemplos…
Hipster barbudo
No sabemos que esté peor, si el pelo a rape en los laterales, la barba descuidada al estilo filosofo-ruso-mamila o esa camisa cuya tela podría verse bien en unas sábanas de abuelita o mantel de restaurante de quesadillas. Tres factores que juntos, dan como resultado algo así:
Agreguemos además, la actitud de tristeza y reflexión en la mirada del barbón. Él piensa que está a la moda, pero pus no.
Hipster músico en dos ruedas
Un hipster ciclista se tolera, un hipster con aire de músico también, pero ¿qué tal una mezcla de ambos?
En el caso del ejemplar de la foto, va a bordo de una fixie (bicicleta retro, pero así le dicen ellos por hacerse los interesantes), un gorro de cazador de osos estilo Chavo del Ocho (a los hipsters les chifla Chespirito), un bigote estilo Don Ramón y claro, un ukulele para expresarse.
El trío hipster-maravilla
Cuando sus abuelos les digan que los jóvenes de ahora únicamente hacen el ridículo y son caso perdido, quizá tengan razón:
M-A-D-R-E-S … Lo preocupante de esta imagen es que no corresponde a ninguna fiesta de disfraces (por supuesto, ni eso sería justificación), sino a una fiesta de onda, de ésas a las que no nos invitan. No sabemos cuál de los tres sea el peor, aunque creemos que la playera acapulqueña y la mirada pérdida de la muchacha hipster es la ganadora.
El hipster diva (no lo toquen, anda chido)
Quisiéramos que esta foto fuera broma, pues no concebimos que alguien sea capaz de:
- Decolorarse así el cabello y traer ese corte a la Cristian Castro.
- Tener un tatuaje así en medio del pecho.
- Usar camisa hipster dentro un ¿short? ajustado y entallado.
- Traer cinturón tipo Flans.
Pero eso sí, es muy creyente (por aquello de la cruz).
Hipster cafetalero
Para nadie es sorpresa encontrarse uno o más representantes de la cultura hipster en un Starbucks, cafeterías a las que los hipsters acuden cuando se cansan de tomar infusiones en cafeterías-librerías. También sabemos que a los hipsters no les gusta usar autos para transportarse, pero sí un pony:
Hipster escribano
Los hipsters son almas sensibles e inspiradas que necesitan expresarse. De hecho, muchos se sienten escritores y por ello, cualquier momento es bueno para plasmar sus ideas en una hoja de papel, seguros de que algún día obtendrán el Nobel de Literatura.
Obvio, no escriben en una computadora, porque eso es demasiado mainstream y poco artesanal. Prefieren hacerlo en una vieja Olivetti.
No se burlen, algún día leeremos fascinados las creaciones de este chavo:
Hipster cosmopolita
WTF?!?!
La calceta de vestir aguada… los tenis medio mugrosones y decorados… el overol… el saco dentro del overol… Díganle a los papás de este dude que algo debieron hacer muy, pero muy mal, para que su retoño terminara convertido en esto:
Hipster estilo Bronco Billy
¿Ustedes usarían esta prenda de piel con pelos y lentes rojos de noche?
Hipster armario
A esta chava nomás le faltó ponerse la dentadura de la abuela para traer encima todo lo que había en su casa. Gorro de lana, gafas de sol, blusa de tía quedada, chamarra de cuero, sueter multicolor, pantalón entallado, bolsa, esclavas en el cuello, cámara de fotos.
¡Trae más ropa que Sor Juana Inés de la Cruz!
Hipster payasito
Listo chavos, ahí tienen su “Lunes de Mallitas” edición hipster:
Ni hace falta decir nada sobre las calcetas y la chamarra de este jovenazo ¿verdad?
* * * * *
¿En qué momento permitimos que al mundo se fuera al carajo? Si les sirve de consuelo, la humanidad ya se encontraba amenazada por los hipsters desde hace décadas. Esta imagen explica muchas cosas:
