Ya casi es el día del padre y si el tuyo ha sido un gandaya de esos que no quieres ni ver, ya hay el regalo perfecto, pues gracias al fenómeno que está siendo Luis Miguel: La Serie y como buenos mexicanos que somos, ya hay una piñata con la cara, forma y todo lo demás de Luis Rey, el papá de El Sol.
Durante cinco capítulos, hemos visto a este personaje interpretado por Óscar Jaenada ser la personificación de la maldad pura, pues no solo usó a su esposa, Marcela Basteri, para lograr que Micky tuviera una oportunidad para ser famoso, sino que conforme el niño fue creciendo, Luis Rey buscó sus propios intereses y una vez que su hijo lo hizo a un lado de la parte “creativa”, se dedicó a saquear todo el dinero que le fue posible -al menos así se ha visto hasta ahora dentro de la serie-.
Es por ello que el personaje del padre de Luis Miguel ha sido catalogado como cruel, desnaturalizado, interesado, calculador, manipulador, chantajista, adicto y alcohólico. Por ello, cada domingo se vuelve en el sujeto ideal para ser odiado. Con esta premisa es que un negocio de piñatas en Ciudad Juárez lanzó su más reciente creación: una piñata de Luis Rey.
Las imágenes de esta piñata comenzaron a circular en redes sociales, especialmente en Instagram y Twitter.
Ya hay piñata de Luis Rey , papá de @LMXLM para quien quiera descargar su ira . pic.twitter.com/EcE4Ju6kFj
— marco meza (@marcomeza) 22 de mayo de 2018
A partir de esto Huffington Post México contactó al negocio que vende las piñatas y, según la información que les proporcionaron, la pieza cuesta $500 pesos e incluye palo y dulces.
En internet se ha manejado como “el regalo perfecto para el Día del Padre” pero, ¿en realidad se le regalaría esto a un papá? Bueno, si es como el perverso de Luis Rey entonces sí pero si no… 😮
Luis Miguel: La Serie es transmitida cada domingo a través de Netflix. Hasta el momento y aunque en la plataforma de streaming se vea lo contrario, serán 13 capítulos los que contendrá la primera temporada. En ellos, se abordará a un Luis Miguel al inicio de su carrera y dará saltos al “presente” cuando tiene 18 años y comienza a valerse por sí mismo -o sea, sin la ayuda de su papá-.