La legalización o despenalización de las drogas es una posible solución que desde hace años se maneja en nuestro país contra el crimen organizado y, en el próximo gobierno de AMLO, parece que ALGO llegará a concretarse. Ya le anden haciendo mucho ruido al chicharrón.
Ya se ha dicho mucho sobre la marihuana, pero ahora tocó el turno a la amapola. De acuerdo con el presidente electo, una de las opciones para combatir la inseguridad y violencia en el país es pagar más por el maíz a los campesinos. ¿Cómo? Así es, porque – como muchos saben – en algunos estados de la república la siembra de la amapola es una mejor opción (o una opción a la de a fuerzas) para la gente de campo.
Así, según AMLO, si los campesinos ganan más por sembrar el muy legal maíz, pues no se verían en la necesidad de ocupar sus tierras para producir la materia prima de grupos criminales. ¿Y en el caso de los campesinos que son obligados a ceder sus tierras para esa delictiva chamba? Ehrrrrr…. Bueno, el caso es que López Obrador vislumbra la posibilidad de que “se le pague mejor al campesino que siembra maíz; si en vez de darle tres mil 500 pesos la tonelada -obtienen dos toneladas por hectárea- en vez de eso se les pagan diez mil pesos”.
En conferencia de prensa dictada desde Zacatecas, entidad en la que se reunió con el gobernador Alejandro Tello, AMLO apuntó que lo anterior no es lo único que se está considerando para combatir la inseguridad. También se analiza la legalización de algunas drogas… sólo algunas, no sean tan atascados. Sin embargo, lo que más se visualiza es atacar el tema desde su raíz: con el combate a la pobreza, la generación de empleos y la atención a los jóvenes.
AMLO y su equipo de la Cuarta Transformación no son los únicos que han barajeado la posibilidad de legalizar (o, mínimo, despenalizar) quemarle las patas al diablo. Desde la iniciativa privada se ha insinuado lo mismo, caso de Ricardo Salinas Pliego… y, ahora, desde las mismísimas fuerzas armadas. ¡¡¡¡??? Así es. Para asombro de propios y extraños, el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, señaló que no sería mala idea legalizar la amapola… al menos para Guerrero, donde la acción podría ser una “salida” para el problema de la violencia.
“Ya está en la mesa (la propuesta) y creo que puede ser una salida al problema, habría que estar tratando de ver cómo se atendería la seguridad de los campesinos que ya no le van a vender a delincuentes, sino al gobierno”.
Y mientras muchos comienzan a decir: “órale papá, ahí está el pan: ya dale duro a la legalización”, AMLO se limitó a decir que recogerá el punto de vista de Cienfuegos… lo mismo que otras propuestas. Ya después las juntarán, analizarán y… a ver qué conviene. Buhhhhh.