Uno de los puntos más polémicos de la consulta de Revocación de Mandato fue la participación en cuatro llantas de Mario Delgado, el dirigente nacional de Morena. El líder de los guindas se presentó —e incluso hizo promoción en sus redes sociales— con una camioneta blanca de pasajeros.
Su intención era la de llevar a los votantes a sus casillas en la Ciudad de México.
La cosa es que, ese aventón o raite, como le dijeron, provocó reacciones importantes. La primera de ellas fueron acusaciones de que, más que una movida de participación ciudadana, se trataba de un delito electoral. Acá te contamos un poco todas las versiones.
¿Fue delito electoral?
Uno de los asuntos más compartidos en las últimas horas ha sido un fragmento, importante, de la Ley General en Materia de Delitos Electorales.
Si quieren consultarla completa ACÁ ESTA EL LINK, pero pueden echarse un clavado específico al Artículo 7 que tiene una amplia lista de delitos electorales que incluyen penas de seis meses a tres años de prisión, al mismo tiempo que una multa. Ahí señalan, en el apartado X a quien “organice la reunión o el transporte de votantes el día de la jornada electoral, con la finalidad de influir en el sentido del voto”.
El consejero presidente del INE, cuando le preguntaron, consideró que llevar personas a votar, el acarreo, era un delito electoral grave.
Las autoridades electorales dijeron que se iban a mantener al pendiente de las denuncias que recibieran al respecto y de cómo, aunque no lo mencionaron personalmente, había actuado Mario Delgado durante la Revocación de Mandato.
Mario Delgado se defendió
Por supuesto que Mario Delgado se defendió de las acusaciones de un posible delito electoral.
En una entrevista durante la tarde, con TV Azteca, dijo que todo lo hacía para ayudar y tratar de evitar enredos con la ubicación de las casillas. “No tiene sentido que en una misma unidad habitacional unos vecinos tengan que ir a una casilla y otros vecinos tengan que ir a otra, por eso estamos ayudando a la gente que de manera voluntaria vaya a votar y se manifieste libremente”, comentó.
En la tarde siguió explicando que solo se había organizado con sus vecinos. “Dar ride no es ningún delito”, aseguraba.
Otra de las dudas importantes era el uso de recursos públicos y de dónde, supuestamente, había conseguido la camioneta blanca con la que llevó a votantes a las casillas. Al respecto, dijo, era de unas vecinas suyas en la alcaldía Iztacalco.
En la sesión del INE, Morena también defendió a su líder nacional. Ellos aseguraban que formaba parte de una comunidad organizada para participar en la elección de la Revocación de Mandato y que, en realidad, era culpa del INE por la ubicación de casillas. “Si darle raite a los compañeros, a los vecinos, a los amigos, para facilitarles el acudir a ejercer su voto, me declaro culpable”, terminó el representante de los guindas.