Aparte de que las autoridades se han hecho majes para completar la orden de aprehensión que desde hace más de un año un juez liberó contra Kamel Nacif y Mario Marín, éste último vio burro y quiere viaje. En otras palabras, busca sacar provecho de la pandemia para librar la cárcel.
¿Cómo? Pues ya se las autoridades de Salud han alertado que el virus que provoca el COVID-19 pega más duro en grupos como los de la tercera edad y pacientes con enfermedades crónicas, Mario Marín ahora alega su supuesta vulnerabilidad para beneficiarse con un amparo contra la orden de aprehensión que tiene por la tortura de la que fue víctima la periodista Lydia Cacho.
Lo anterior fue denunciado por la propia Lydia Cacho por medio de sus redes sociales. De acuerdo con la autora de Los Demonios del Edén, para poder obtener el amparo Marín ha recurrido a soltar dinero en Tribunales… a ver si así los jueces se compadecen del hombre que, además de ser acusado de tortura, es señalado como encubridor de tratantes de menores.
“Sus abogados dicen que porque tiene 60 años no debe ser arrestado para que no enferme por COVID-19”, escribió Lydia Cacho en mensaje dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador, a las autoridades de la Fiscalía General de la República y a la titular de la SEGOB, Olga Sánchez Cordero, a quienes pide vigilar la “corrupción del Magistrado Óscar Rodríguez Álvarez del 2o Tribunal Unitario de Circuito de Cancún”.
Lydia Cacho solicita a la Suprema Corte de Justicia de México que haga lo necesario para evitar que la pandemia sea instrumento para fomentar mayor impunidad criminal. Pos están viendo que desde hace meses se ha señalado la ubicación del exgobernador de Puebla y ni así lo han aprehendido… y ahora esto.
La alerta de Cacho es mayor, ya que por ahí le han contado que el mentado magistrado de Cancún, Óscar Rodríguez, ha dicho que “le preocupa mucho la salud del exgobernador Marín”…. “¿Y mi derecho como víctima de tortura? ¿y el derecho de las niñas y niños víctimas de pornografía infantil?”, pregunta la periodista y escritora.
El pasado 16 de abril se cumplió un año de que se dio a conocer la orden de aprehensión en contra de Mario Marín y Kamel Nacif por la tortura en contra de Lydia Cacho. Aunque en diferentes ocasiones se ha señalado la posible ubicación del exgobernador de Puebla, el arresto de ésta nomás no se cumple… según ha denunciado Cacho, esto se debe a que cuenta con protección de autoridades de la entidad que gobernó.