La complicada situación por la que atraviesa nuestro país ha hecho que el periodismo se convierta en una profesión peligrosa. Considerando que el objetivo principal de esta profesión es informar a la sociedad, no sólo están en riesgo los periodistas si no todo el país sufre cuando se agrede a quienes tratan de divulgar la verdad.
Un informe de la Comisión Interamericana de Derechos humanos dice que México es el país más peligroso en Latinoamérica para ejercer periodismo, ya que del total de asesinatos que se docuemntaron entre 2010 y 2015, 3 fueron aquí.
Gracias al informe del tercer trimestre 2015: Epidemia del miedo a comunicar, de la organización independiente ARTICLE 19, quienes se han dedicado a promover y defender los derechos de libertad de expresión y acceso a la información de todas las personas, se pudieron saber muchos datos preocupantes sobre este tema.
Rubén Espinosa; un parteaguas para la seguridad de la prensa en el DF
El sonado caso de Rubén Espinosa, el fotoperiodista que murió junto con cuatro mujeres en la Narvarte, es un parteaguas en cuanto al periodismo en México ya que él había venido al DF a refugiarse de las amenzas en su contra.
El DF históricamente había sido un refugio contra la violencia de prensa en nuestro país, pero este caso demostró que ya nisiquiera la capital es territorio seguro. Este violento multihomicido se agrava incluso más porque las autoridades han violado protocolos de investigación, incluyendo revictimización, la filtración de información a medios de comunicación, la falta de pruebas y contradicciones en la investigación, y la falta de acceso al expediente por parte de los coadyuvantes del caso, poniendo en riesgo las conclusiones y el acceso a la justicia para las víctimas.
Además de que según personas cercanas a las víctimas e incluso un video de la activista Nadia Vera antes de su asesinato, inculpan al gobierno de Javier Duarte por estos ataques.
Funcionarios públicos y periodistas
Según el reporte de Article 19, en los últimos siete trimestres, los funcionarios públicos son quienes más han agredido a periodistas. Este dato es gravísimo considerando que son precisamente las autoridades las que deberían defender a los periodistas y que son estas las que han culpado a los grupos de crimen organizado de laviolencia contra la prensa.
“‘La violencia contra comunicadores se ha visto agudizada en aquellas zonas o territorios en los que existe fuerte presencia del crimen organizado. En muchos casos, lamentablemente, se ha verificado que estas organizaciones ejercen la violencia en colusión con agentes estatales’’