Y en noticias que a nadie sorprenden… pues resulta que el exgobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes no era tan anticorrupción como presumía.
De acuerdo con La Jornada, en el último informe presentado por el auditor general, Antonio Lorenzo Portilla, consta que fue detectado un posible daño al erario del Estado jarocho equivalente a 4 mil 500 millones de pesos… todo perpetrado nomás en un año, el último de los dos que duró el mandato del gober panista.
Según el informe de la cuenta pública 2018, las dependencias que más daños recibieron por parte de la administración de Yunes fueron la Secretaría de Seguridad Pública, la Secretaría de Finanzas, la de Desarrollo Social y la de Educación, con montos que van de los 108 a los 564 millones de pesos.
“Encontramos inconsistencias en la aplicación de los recursos públicos respecto de las obras, adquisiciones, pagos a prestadores de servicios, obras no terminadas y obras pagadas no ejecutadas”, señaló el titular del Órgano de Fiscalización (Orfis) de Veracruz.
Portilla explicó a diputados veracruzanos que el gobierno de Yunes dejó expedientes de obras no completos, pero también se detectó la designación de obras sin cumplir los requisitos que marca la ley. Es decir, además de en las dependencias señaladas, también fueron detectadas irregularidades en Infraestructura y Obras Públicas (49 millones 638 mil pesos).
Para informar del daño al patrimonio del Estado perpetrado por la administración de Yunes, el Orfis realizó más de mil 600 revisiones integrales a 328 entes fiscalizables (dependencias estatales, organismos autónomos, ayuntamientos, entidades paramunicipales y el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional Anticorrupción).
Además del daño al erario, fue detectado un cúmulo de faltas administrativas, esto en las secretarías del Trabajo y Previsión Social, Desarrollo Social, Medio Ambiente, Salud y Protección Civil.
Como ejemplo de las irregularidades detectadas, Portilla indicó que la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno de Yunes compró, instaló y puso en operación seis mil cámaras de seguridad en seis regiones de Veracruz. Sin embargo, se detectó que las cámaras no cumplen con los estándares de calidad, lo cual representa un daño patrimonial por más de mil 100 millones de pesos… en total, la administración del panista gastó mil 116 millones de pesos por las dichosas cámaras.