¿Las cosas buenas no se cuentan?
Es complicado creer la palabra del Gobierno Federal cada que se escucha la ahora famosa frase, especialmente cuando tiran una piedra y luego esconden la mano.
Hoy, la novedad es que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, o Semarnat para los cuates, aprobó –a través de su nuevo Plan de Manejo– la tala de un tercio de bosque en el Nevado de Toluca.
“¿¡Qué!?”, dirán algunos.
“Así como leen”, les respondemos.
Este Plan de Manejo fue presentado el 21 de octubre de 2016, tres años después de que Enrique Peña Nieto le removiera la etiqueta de Parque Nacional al Nevado de Toluca y lo convirtiera en un Área Natural Protegida con la intención de explotarlo.
Y, al menos en apariencia, el día en el que podemos estar entrando en el inicio del fin de este espacio ha llegado. Según los análisis de los expertos, la situación actual del Nevado de Toluca (y la inercia de daño que lleva) terminará por hacer que los recursos de esta Área Natural se pierdan por completo en las próximas décadas. Cuatro décadas como máximo.
Una breve historia de la “protección” al Nevado
Revisando los anales de la historia, recordaremos que en 1936 el entonces presidente Lázaro Cárdenas quiso proteger al Nevado de la explotación clandestina de sus recursos naturales y por eso lo convirtió en un Parque Nacional, para que los gobernantes (municipales, estatales o federales) evitaran el saqueo o aprovechamiento indebido de la flora y fauna de la zona.
Sin embargo, su sucesores en la silla poco se preocuparon por defender el Nevado de Toluca, uno de los espacios de recreo favoritos en la región y también una de las principales fuentes de agua para una porción del estado de Guerrero y para los Valles de México y Toluca.
Hoy en día muchas especies de plantas y animales amenazados o en riesgo de desaparecer viven y conviven en el territorio circundante al Nevado de Toluca. Su supervivencia se verá amenazada con la tala de los árboles con fines comerciales. Tala para la que la Semarnat ya dio su visto bueno, según este nuevo Plan de Manejo.
Y eso que el titular de la Semarnat, Rafael Pacchiano Alamán, aseguró que rescatarán el 100 por ciento del espacio.
¿Alguien quiere pensar en el Nevado de Toluca?
En 2013, con el cambio de status de la reserva firmado por Peña Nieto (cuya justificación era la protección de los recursos después de cerca de 70 años de “deterioro generalizado”), el Nevado de Toluca podía ser legalmente usado para la tala o el comercio y otras actividades como la ganadería o la agricultura.
Había varias partes del territorio señaladas como zonas donde el impacto y daño no eran tan graves, y se supone que las autoridades las resguardarían para evitar que siguieran cayendo en la destrucción, pero todo eso está quedando en el olvido.
Con la última aprobación del Plan de Manejo de la Semarnat, un tercio del Nevado de Toluca (aproximadamente 17 mil hectáreas) tiene autorizada la tala comercial. Todo ese cachote de naturaleza se divide en 11 zonas más pequeñas donde se podrán derribar los árboles del bosque.
Esto es preocupante porque el Plan no sólo autoriza la destrucción de grandes espacios naturales de arboledas, sino que no especifica de qué manera trabajarán las autoridades para proteger el resto de los recursos del Nevado. Sólo se limitan a señalar que realizarán acciones de “aprovechamiento sustentable”. Y ya.
Eso sí, también se difundieron nuevas “obligaciones” para los visitantes del Nevado, no vaya a ser que sean ellos los que se acaben primero.
Es un día gris para el Nevado de Toluca y todos los que han disfrutado visitándolo.
