“El despelote más grande del mundo”. Con este alburero lema fue presentado por el Ayuntamiento de Vera, el evento con el que se rompió el récord mundial de más personas participando en un baño nudista colectivo, en la provincia española de Almería.
Dicen que el cuerpo humano es algo hermoso (nosotros decimos que no hay que generalizar, y que dependiendo del sapo es la pedrada), por eso, 729 bañistas no dejaron pasar la oportunidad de encuerarse y arrebatarle el récord a Nueva Zelanda, que anteriormente había reunido a 506 personas sin ropa.
El chiste de este récord, que para ser honestos no le trae beneficio alguno a la humanidad, es congregar al mayor número de personas bañándose al mismo tiempo en una playa. Para alcanzar este honroso reconocimiento, el Ayuntamiento de Vera, en colaboración con la Federación Española de Naturismo, lanzó una convocatoria para reunir a todos los valientes que quisieran mostrar sus pellejos su piel en la zona conocida como “El Playazo”.
Conforme iban ingresando, a las personas se les entregaba un boletito con un número de registro y se les grababa en video ante la presencia de un notario, por aquello de que no haya chanchullo y luego no anden pidiendo el recuento “encuerado por encuerado”.
Fue al mediodía, cuando se dio el banderazo de salida, y los participantes se dieron su buen chapuzón. Aquello parecía caldo de menudencias.
A continuación, unas fotografías con los participantes. No esperen ver modelos, sino gente real, como ustedes, la tía a la que sólo ven en Navidad o su vecino que se encuentran los sábados en el puesto de jugos de la colonia. Igual y alguno se prende con las imágenes, ya ven que en gustos se rompen géneros:
Se lo llevó la ola:
Huele a Salami:
No crean que la encueradera fue nomás porque sí. Después de ver las fotos muchos hasta dirán “pues claro, muchos ya no tenían nada que perder”. Pero para el Ayuntamiento de Vera, este récord servirá para promocionarlos como destino turístico a nivel internacional.
En México los récords absurdos se nos dan mejor que a ningún otro país, ¿por qué no intentar algo así en alguna de nuestras playas para atraer más turismo? (que buena falta nos hace). Por supuesto, teniendo mucho cuidado al agacharse, no vaya a ser la de malas.