Todo parece indicar que al presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, nomás no le gusta que las automotrices (y cualquier otro tipo de empresa) haga negocios en México. Ya se lo dijo a Toyota, también a Ford y General Motors. Ahora se lo “recomienda” a BMW.
En entrevista ofrecida para el diario alemán Bild, el hombre que asumirá la presidencia norteamericana este viernes, aconsejó a BMW construir su nueva planta en Estados unidos… ya que eso le resultaría “mucho mejor” a la compañía.
Y vaya que sí. De no tomar en cuenta sus palabras y aventarse a construir la nueva planta en México, se le podrían imponer a los autos manufacturados en territorio nacional y exportados a EEUU impuestos de hasta 35%.
will only get higher. Car companies and others, if they want to do business in our country, have to start making things here again. WIN!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 15 de enero de 2017
Para suavizar un poco sus palabras, Trump pidió no ser malentendido. Es defensor del libre comercio… pero no a cualquier costo.
La empresa automotriz, que ahora está en la mira de Trump, dio a conocer sobre la construcción de una planta en San Luis Potosí. Ésta se encargaría del ensamblaje de la Serie 3 del BMW a partir de 2019. Esta nueva planta ayudaría a la producción que ya realizan las existentes en Alemania y China.
Un portavoz de BMW comentó que la empresa “se siente muy en casa en Estados Unidos”, donde emplea de forma directa e indirecta a casi 70 mil personas.
Trump –que se ve que le sabe a esto de los tratados comerciales por puro feeling– señaló que Alemania era un gran productor de autos. Se ve por la gran cantidad de Mercedes Benz que se dejan ver en Nueva York. Sin embargo, es injusto esto dado que no hay reciprocidad de parte de los teutones. Ellos no compran Chevrolets al mismo ritmo, declaró.
Aunque estas amenazas parecen como hechas por un niñote berrinchudo, sí han surtido efecto. En el caso de Ford, una vez amenazada la firma automotriz canceló la construcción de su planta en San Luis Potosí. Prefirió invertir 700 millones de dólares en su planta de Flat Rock, Michigan.
Si BMW cede a las amenazas, se perdería una inversión anunciada de mil millones de dólares.