Por medio de una conferencia de prensa virtual, el alcalde del municipio de San Pedro Garza García, en Nuevo León, Miguel Treviño, informó que durante el fin de semana se multó a tres particulares por andar organizando bodas en plena pandemia de COVID-19.

El funcionario explica que en dos casos no se pudo evitar la celebración ya que la fiesta ya había iniciado por lo que solo se les presentó la sanción por parte del municipio y el último caso era una boda que se iba a llevar a cabo en el club Palestino-Libanés y se terminó clausurando.

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Foto: Ayuntamiento San Pedro Garza García

Dos de las bodas se llevaron a cabo en domicilios privados, en la Joya del Venado y Hacienda El Rosario, respectivamente. El alcalde aseguró a la ciudadanía que seguirán evitando que se realicen fiestas, aunque sea en domicilios privados ya que estamos en una emergencia sanitaria y es momento para cuidarnos.

“No es momento para hacer fiestas, no es momento para celebrar bodas“, explicó.

Informó que por el momento se han entregado más de dos mil advertencias por parte de la policía municipal de San Pedro: mil 946 para personas que no están usando cubrebocas y 173 a personas que se están moviendo entre municipios de manera injustificada.

Bodas y más bodas

Aunque no es el mismo municipio, ni el mismo estado, parece ser que la pandemia por COVID-19 y las medidas de sana distancia para evitar contagios, como las aglomeraciones, pasan inadvertidas ante la necesidad de celebrar una boda.

El fin de semana pasado, en Zapopan, Jalisco, Camila Fernández, hija del cantante Alejandro Fernández, se casó en una fiesta “íntima” y sin invitados famosos: nomás la familia. A pesar de que los asistentes siguieron, en su mayoría, las recomendaciones de usar mascarilla y mantener la distancia, la ceremonia fue ampliamente criticada por los usuarios en redes sociales.

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