Hoy nos enteramos de que Obama ordenó a su personal que elaborara un decreto que prohibiera a los contratistas federales la discriminación laboral en contra de lesbianas, gays, bisexuales y trans, y sí, no ayuda a toda la población LGBT en su país, aunque no lo hizo para eso, fue para mandar un mensaje ¿cuál?
Para The Huffington Post esto es una indicación clara de que el gobierno estadounidense está dispuesto a tomar medidas sobre los derechos de la bandita LGBT en el Congreso, y es que el pleito es muy grande en el gobierno de ese país. La Casa Blanca, por un lado, ha estado presionando al Poder Legislativo para que saque una ley que proteja los derechos laborales de los ciudadanos LGBT, pero el Congreso estadounidense se comporta como si todavía estuviera en el Shot Down, ya que todo lo tienen congelado (como la reforma migratoria, que no ha avanzado… como siempre es cosa de los republicanos).
Obama tiene el poder para hacer un decreto tanto para los migrantes como para los derechos LGBT, pero no le conviene utilizar esta carta, pues sería visto como una especie de dictador, así que está esperando que todo salga de la manera más democrática posible… pero la democracia, como sabemos, es lenta (aunque más representativa y con mayor legitimidad).
Aún así, Obama ha emitido en lo que va del año algunas órdenes ejecutivas sobre otras prioridades domésticas (solo que al ver esto, activistas han pedido que lo haga con otros temas más cruciales).
Así que Obama ha prohibido a los contratistas federales que discriminen laboralmente a los homosexuales, lanzando, de esta manera, un mensaje al Congreso que diría más o menos: «ustedes deben proteger los derechos laborales en todo el país».
Actualmente ninguna ley en ese país protege a las lesbianas, gays, bisexuales y trans de ser discriminados a la hora de solicitar un empleo o permanecer en un trabajo (o a la hora de recibir prestaciones laborales), aunque sí prohíben la discriminación laboral por raza o religión.
***Vía The Huffington Post