Si ayer estuvieron más entretenidos siguiendo la forma en que la regaba la selección (ah y también perdió su partido contra Brasil), no se preocupen, no se perdieron de mucho: el mundo continúa siendo igual de racista.
Una pelea hizo que vecinos de una alberca comunitaria ubicada en McKinney, Texas, solicitaran la presencia de la policía ya que, además del pleito, alegaban que en el inmueble había jóvenes que no vivían en la zona ni contaban con permiso.
Sin comprender por qué les aguadaban la fiesta, la chaviza se negaba a ir… o de menos quería una explicación convincente, lo que hizo que los uniformados comenzarán a realizar detenciones a diestra y siniestra.
Aunque la mayoría de los oficiales se la lleva leve, un policía destaca por su actitud agresiva contra todo mundo… y después de solicitar de buena manera a unas chicas que se retiraran del lugar –“¡saquen sus traseros de aquí!”-, al no obtener la respuesta deseada procede a detener violentamente a una de ellas.
“@Xmukexziamx: RT #craigranch #RETWEET pic.twitter.com/kEXV5yCXKS” This is not okay. It’s not fucking okay #McKinney
— girl . (@larryftniell) junio 8, 2015
La forma en que el agente arresta a la chica de 14 años causó indignación entre usuarios de redes sociales que rápidamente difundieron las imágenes, provocando que el uniformado en cuestión fuera cesado mientras se realiza la investigación correspondiente.
Además de la manchada forma de tratar a la adolescente, el policía –identificado como Eric Casebolt- enfrenta proceso por desenfundar su pistola contra los jóvenes que intentaron defender a la chica.
Según testigos de los hechos ocurridos el viernes, la policía sólo procedió contra los jóvenes afroamericanos, mientras que nada hizo cuando al llegar al lugar una chica y varios adultos blancos gritaban comentarios racistas. “Creo que un montón de padres blancos estaban enojados de que un grupo de chicos negros que no viven en el vecindario estuvieran en la alberca”.
El departamento de policía local ofreció una conferencia de prensa ayer, informando la suspensión e investigación del agente Casebolt, sin embargo no respondieron a preguntas formuladas por vecinos afroamericanos del lugar: “¿Cómo sabía la policía quienes eran los chicos que no viven en el vecindario”, “Vivimos aquí, pagamos impuestos, somos respetuosos de la ley, ¿por qué se nos trata de manera diferente a los demás?”
*Vía Huffington Post