Mandatarios y ministros de América Latina y el Caribe realizan una cumbre extraordinaria para pensar en una acción conjunta para que el ébola no penetre en la región.
Son 12 líderes de países que pertenecen al ALBA, Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América y celebran la cumbre extraordinaria en La Habana, Cuba.
El presidente cubano, Raúl Castro, quien pidió evitar la politización del ébola, expresó:
«Una terrible epidemia se propaga hoy por los hermanos pueblos de África y nos amenaza a todos»
«Si esta amenaza no se frena en África Occidental, puede convertirse en una de las pandemias más graves de la historia de la humanidad»
El presidente cubano recordó:
«Por las venas de nuestra América corre sangre africana»
El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, dijo:
«Es la salud la que nos convoca hoy aquí, frente a la epidemia del ébola que afecta a hermanos en África particularmente y que se ha trasladado a países desarrollados»
A la reunión asistieron la directora de la Organización Panamericana de la Salud, Carizza Etienne y David Nabarro, el enviado especial del Secretario General de la ONU Ban Ki-moon.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, afirmó:
«la cumbre busca dejar un nivel de coordinación perfecta entre nuestros ministerios de salud, nuestras autoridades y científicos en la materia, para que nuestros países avancen frente a esta amenaza»
Por otro lado, hay que destacar esta reunión, ya que se nos hace importante que este tipo de estrategias se piensen de manera global (ya saben, para que no pasen cosas como los contagios en Estados Unidos), haría falta que también la OEA (Organización de Estados Americanos) convocara la suya, o por lo menos la CELAC (Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe en la que está también México).
En la reunión del ALBA participaron Venezuela, Bolivia, Ecuador, Nicaragua, Cuba, Antigua y Barbuda, Dominica, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, además de Haití, Granada y San Cristobal y Nevis.
Cuba lidera esfuerzos contra ébola
Algo que seguramente han visto en otros medios es que Cuba es un país que está al frente en la lucha contra el ébola, pues han enviado a 165 médicos y enfermeros a naciones africanas afectadas por el virus, además enviarán 300 más. El mismo secretario de Estado estadounidense, John Kerry, reconoció el viernes pasado la labor cubana y sus aportes a la lucha contra el virus.
Es más, The New York Times publicó el día de hoy que la pequeña isla tiene el papel más sólido entre las naciones que tratan de contener al virus.
Mientras países desarrollados luchan contra el virus en uno o dos de sus ciudadanos y prometen recursos a Áfrcia, Cuba lleva médicos a ayudar a los africanos.
The NewYork Times se lamenta que su país (los Estados Unidos) y Cuba estén distanciados, ya que, mientras, por un lado, Cuba manda gente, Estados Unidos lleva dinero ¿No sería excelente que hubiera una coordinación entre ambos países para que las acciones para frenar al virus sean más efectivas?
Para el rotativo el trabajo de los médicos cubanos debería ser reconocido por el mundo entero, ya que ellos arriesgan la vida para que el virus no llegue a este lado del mundo.
También recuerda el papel de los médicos cubanos en los brotes de cólera que se dieron después del terremoto de Haití del 2010.
Cuba tiene una larga tradición de enviar médicos y enfermeras a las zonas de desastre en el extranjero. En las secuelas del huracán Katrina del 2005 ofreció mandar a un grupo de médicos a Nueva Orleans, aunque los Estados Unidos rechazó la oferta.
Los médicos cubanos están especializados para trabajar en África ya que muchos ya lo habían hecho…aunque es difícil que manden ayuda gracias al bloqueo estadounidense (lo cual imposibilita a la isla para adquirir equipos modernos y mantener abastecidos sus estantes médicos).
El New York Times cita a Fidel Castro en un texto publicado en el diaro cubano Granma en el que dice que Estados Unidos y Cuba deberían olvidar sus diferencias por lo menos en lo que se resuelve la amenaza del ébola… calvez muchos odiemos a Fidel, la cosa es que el señor tiene razón.