Para demostrar que en sus filas cuentan con el mejor smartphone, las empresas fabricantes de teléfonos celulares son capaces de cualquier cosa, incluso de someter a las más crueles torturas a su producto estrella.
Uno de las características que valora un consumidor, es en la resistencia del producto.
En Samsung aseguran que el Galaxy S4 es irrompible y mucho más resistente que sus competidores. Para comprobarlo tuvieron la idea de maltratar este teléfono hasta el cansancio.
Golpearlo, meterlo a un horno o mojarlo. Todo esto con ayuda de máquinas e instrumentos especiales que avientan, aplastan, y golpean el celular, todo para descubrir que al final no sufrió ningún daño.
Incluso la pantalla, que es el elemento más endeble en este tipo de dispositivos, resistió las pruebas.
Si eres de los que siempre tiran el celular, y además tienes manos de estomago, igual y este teléfono te dura más de dos meses.