Mientras que parece que en el Estado de México la cuestión electoral está en standby, donde siguen dándole duro para conseguir la ansiada anulación es en Coahuila. Ahí, el candidato (¿o excandidato?) del PAN a la gubernatura del Estado, Guillermo Anaya, solicitó a la Fepade y al SAT que averigüen de dónde el candidato del PRI sacó dinero para su campaña.

Además de los exagerados recursos que concede el INE cuando se está en época electoral (y cuando no, también), los partidos tienen mañas para tener más recursos para comprar el voto difundir su nada grácil imagen. En el caso del abanderado del PRI, en los pasados comicios coahuilenses, Miguel Ángel Riquelme, habría obtenido alguna lana de parte del todavía gobernador de la entidad disputada, Rubén Moreira, quien siguiendo la línea de Betito Borge y Javidú, desvió recursos públicos para cooperarle al del tricolor en su camino a la gubernatura.

Miguel Ángel Riquelme, nuevo gobernador de Coahuila
Foto: Twitter

“Estamos pidiéndole a la Fepade algunas pruebas junto con el SAT que tenemos algunos elementos que son inconsistencias del PRI pagando facturas al gobierno del Estado pagando a las campañas del PRI, ya tenemos la documentación”, comentó en entrevista para Político Guillermo Anaya.

El asunto no es nuevo. Antes de las elecciones –por ahí de abril– el PAN acusó un desvío de recursos en Coahuila por 32 mil millones de pesos, razón por la que dijo que se presentaría una denuncia penal ante la PGR en contra del exgobernador y del actual gobernador (Humberto y Rubén Moreira) y, ya de paso, contra el candidato Riquelme.

En ese entonces, el presidente nacional del PAN, Ricardo Anaya, señaló que información del Sistema de Inversión Pública del gobierno de Coahuila constataba que de 2006 al 2011, el gobierno coahuilense (encabezado por los Moreira) declaró un gasto de 48 mil millones de pesos… cuando sólo se comprobó la inversión de 26 mil millones. ¿Qué pasó con el resto?

Para tal saqueo, los Moreira no trabajaron solos: lo hicieron con ayuda de varios de sus funcionarios. Uno de ellos, el entonces responsable para la inversión para el desarrollo regional de La Laguna, Miguel Ángel Riquelme, quien declaró un gasto de 3 mil millones de pesos, pero sólo comprobó mil 220. En otras instancias no se quedaron atrás: en la Secretaría de Gobierno, la de Desarrollo Social y en la de finanzas también hubo faltantes. Cabe señalar que estas dependencias estaban encabezadas por gente que ahora se encuentra en calidad de “prófugo de la justicia”… o bien, como candidatos a diputados, como el caso de Samuel Rodríguez, quien se hizo cargo de la Secretaría de Cultura, la cual no comprobó 4 mil millones de pesos.

Un momento… pero si Anaya fue funcionario dentro del gobierno de Humberto, quien ya hasta está peleado con los del tricolor… qué culpa tiene entonces el pobre Rubén Moreira. Ahhh pues según el otro Anaya (Ricardo), tal pleito es pura farsa, pues Riquelme –como candidato del PRI, partido de Rubén– fue en alianza con muchos partidos, uno de ellos el Partido Joven, el cual candidateó a Humberto Moreira para diputado… tanta unión hace poco creíble la disputa.

Además de las muy posibles transas de dinero, Guillermo Anaya pidió a la Fepade que se investigue la ausencia de funcionarios de casillas durante las votaciones para elegir gobernador. Según denuncia el panista, cerca de 4 mil funcionarios fueron reemplazados por personas que reciben beneficios de programas sociales del gobierno coahuilense… Ya con tanto (más los señalamientos de la OEA), se espera que el Tribunal Electoral de Coahuila termine por anular la elección.

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