Es muy probable que Grupo Bimbo cambie las recetas de algunos de sus productos para reducir sus calorías (y ahorrarse el pago de impuestos)
No es que la empresa decidiera tomar acciones por el gran primer lugar que ostentamos en obesidad o porque quieran ser lights, sino porque la reforma fiscal incluye un impuesto del 5% a productos que tengan 275 o más calorías por cada 100 gramos. Si Bimbo decide adelgazar al osito, evitaría así el impuesto a alimentos “chatarra” que propone la reforma fiscal.
Bimbo, dueño de Marinela, Ricolino, Barcel y Tía Rosa, sería la compañía más afectada por el gravamen, ya que un 13% de sus ventas consolidadas en México son de marcas con productos de alto contenido calórico, de acuerdo a un reporte del Banco BX+.
“El precio de su acción ha disminuido 11.5 por ciento en el último mes, debido a la expectativa de incrementos en los costos de dos de los insumos más importantes para Bimbo (huevo y trigo) afecten los resultados ya que en el peor escenario será difícil trasladar a los precios finales, erosionando las utilidades”
El Gansito Marinela contiene 392 calorías por cada 100 gramos, y los Chocorroles, 388, por lo que una reformulación para evitar el impuesto implica una reducción de al menos 42 por ciento de su contenido calórico.
“Si la medida se aprueba, consideraremos alternativas para reformular nuestros productos, pero vamos a asegurarnos que sea algo que el consumidor quiera que hagamos”, afirmó Daniel Servitje, director general de la empresa.
Independientemente que los incentivos de la compañía en reducir su contenido calórico, son perversos, es una buena medida para dejar de engullir alimentos que nos generan un placer momentáneo a cambio de producir un malestar físico a largo plazo.
Es un hecho que gravar alimentos chatarra no combatirá la obesidad, los niños seguirán comiendo mal porque sus padres comen mal y porque sus héroes en la televisión comen mal. En la escuela, por ejemplo, ¿qué información y capacidad de libre decisión tienen los niños?
Es necesario entrar de fondo en el tema educativo, porque de cualquier forma Bimbo no tendría que preocuparse, puede hacer mucho dinero con productos más sano.