Arrestado desde el mes de julio por su presunta implicación en diversos delitos, ayer el líder de las autodefensas en Aquila, Michoacán, Cemeí Verdía, recibió el auto de libertad… aunque con reservas de ley.
La decisión del juez tercero penal, con sede en Michoacán, Jaime Liera Álvarez, se basó en la falta de pruebas suficientes que demuestren que el comandante de la Policía Comunitaria de Santa María Ostula haya tenido responsabilidad en el homicidio de un sicario de los Caballeros Templarios, quien murió en mayo pasado en una emboscada.
“Se resuelve la situación jurídica del imputado: libertad por falta de pruebas para procesar. La libertad es bajo las reservas de ley”, señala el comunicado dado a conocer por el Poder Judicial local.
A ver si ésta es la buena, ya que no es la primera vez que Cemeí sale libre, pero nada más para volver al bote. Así es: recordemos que primero lo acusaron de portar armas de uso exclusivo del Ejército, delito que libró también por falta de pruebas… sin embargo, fue retenido y preso nuevamente por homicidio calificado, así como el robo de 60 rollos de alambre, los cuales eran propiedad del ayuntamiento local. Eso sin contar los delitos electorales que también le achacaron, pero que puro sortear durante el transcurso del litigio.
Pero la liberación de Cemeí tuvo un precio: según el abogado defensor, Ignacio Mendoza, ésta se dio a cambio de que la Defensoría de Oficio sea la que lleve el caso y control del expediente. También se condicionó la libertad del ex líder de autodefensas con tal de que se levante el bloqueo que pobladores de Aquila realizan en la carretera, así como “le bajen al tono al movimiento”…
De acuerdo con Mendoza -quien dejó el caso hace cuatro días-, el que abogados de oficio ahora lleven el caso de Cemeí, forma parte de una estrategia del gobierno michoacano para “apaciguar” al líder de autodefensas.