Por si hacía falta algo más en Puebla: mientras que en Morena aseguran que dirigentes y candidatos ya son perseguidos por la ley (cortesía de Rafel Moreno Valle), el gobierno del Estado insinúa que nomás están haciendo el #NeymarChallenge: no hay ninguna orden en su contra y los elementos del Hotel MM (con los que acusan fraude electoral) continúan investigándose.
Luego que el líder de Morena en Puebla, Gabriel Bistro, acusara que ya tiene orden de detención por los hechos ocurridos el pasado 3 de julio en el Grand Hotel MM, el partido fundado por AMLO (sucursal Puebla) lanzó un comunicado en el que acusó que la acción legal es debido a que Bistro y otros militantes han revelado el supuesto fraude electoral en la elección de gobernador (cuya ganadora fue la panista Martha Erika Alonso). “El Morenovallismo muestra su cara más autoritaria y ruin, al utilizar a las instituciones públicas, como es la Fiscalía General, para perseguir a disidentes políticos”.
Sin embargo, para fortalecer los señalamientos que en redes se hace contra los morenistas poblanos, en los que se acusa que no saben perder y que el supuesto fraude electoral no es más que “paranoia”, el gobierno de Puebla salió rápido a desmentir a Bistro y a Morena: “no hay órdenes de aprehensión contra dirigentes o candidatos electos de Morena en Puebla. Es en las instituciones donde deben dirimirse los conflictos”, señaló el titular de la Secretaría General de Gobierno, Diodoro Carrasco.
Por otra parte, la Fiscalía General de Puebla agregó que los hechos ocurridos en el Grand Hotel MM continúa. “El caso se turnará al Centro de Mediación”, informó.
¿Qué pasó en el Grand Hotel MM?
La chispa que encendió la ya de por sí caliente acusación de fraude en la elección de gobernador en Puebla, fue el descubrimiento de un centro en el que supuestamente el PAN operó la manipulación del Programa de Resultados Preliminares (PREP). De acuerdo con La Jornada, la presunta sede de la “mapachería” blanquiazul era el mentado Hotel MM y, al arribar al lugar, morenistas aseguraron haber hallado elementos que sirven para acusar que ahí se fabricaban paquetes electorales clonados… utilizados para colocar a la panista Martha Erika Alonso como virtual ganadora de los comicios.
No hay órdenes de aprehensión contra dirigentes o candidatos electos de @MorenaEnPuebla tras hechos en el Hotel MM, informa el titular de la @SGGPuebla, @DiodoroCarrasco. (📹@MarthaErikaA)
pic.twitter.com/anWD1AyxLe— LupitaJuarez (@LupitaJuarezH) 11 de julio de 2018
Sobre la irrupción de los de Morena en el Hotel MM se difundieron varios videos en redes. En uno de ellos se podía ver a Omar Blancarte Montaño, presunto operador electoral del PAN, a quien se le arrebataron carpetas. Según Eric Cotoñeto Carmona, operador del candidato de Morena, Miguel Barbosa, en las carpetas había toda la lista de los paquetes electorales en los que se alteraron los resultados para aventajar a Érika Alonso en los conteos… y, de paso, quitar sufragios Barbosa.
Según cálculos de Cotoñeto, en el Hotel MM se habrían alterado documentos de aproximadamente 3 mil casillas; es decir, casi la mitad de los 7 mil 547 puestos de votación que se instalaron en los comicios del 1 de julio. Como responsables de la operación, el operador de Morena acusó a integrantes del PAN y del Instituto Electoral del Estado (IEE).
Al Hotel MM llegó el dirigente del PAN en Puebla, Jesús Giles Carmona, quien – obviamente – negó que en el inmueble se estuvieran operando acciones ilegales. ¿Entonces? Según Giles, se realizaba un recopilado de las copias de las actas de escrutinio y cómputo, las cuales habían sido previamente entregadas a los representantes que el PAN envió a las casillas. Puras copias, nada de originales.
Estos hechos fueron reportados ante las autoridades. Cerca de 100 elementos de la SSP efectuaron el resguardo del material encontrado en el Hotel MM (actas de escrutinio, cómputos de votos, sábanas electorales y computadoras) y, bueno, según se realizarían las investigaciones. Hasta el momento no se han ofrecido avances, pero ahora que el caso se volvió a encender, las autoridades dicen que siguen en las pesquisas. A ver qué sale.