“¡Ya métanme al bote!”, podríamos suponer que está pidiendo a gritos el ex dirigente capitalino del PRI… pero la urgencia de Cuauhtémoc Gutiérrez porque se le aplique la justicia es porque –según él- todos los señalamientos que hay en su contra, por el presunto manejo de una red de prostitución a su servicio, son de carácter anónimo. Así que no hay bronca: sí la libra.
“Que ya determine si me van a procesar o no, si hay elementos para que un juez conozca del caso o en su caso el no ejercicio de la acción penal por no acreditarse ningún delito de los que me imputó en su momento el PRD en aquella demanda”, exigió.
Entrevistado por Radio Fórmula, el también conocido como “El rey de la basura”, pidió a la procuraduría capitalina que se defina su situación jurídica… eso sí, nomás con la pura “ley”… que no se deje influenciar por el desprecio popular que entre diversos grupos de la sociedad ha despertado el conocer detalles de la forma en que se presume trataba a jóvenes que nomás iban por una chamba de edecán o asistente para el priista… y pues a la mera hora tenían que hacerle sus “favorcitos” al líder.
“La Procuraduría debe actuar con la ley en la mano, debe apegarse no a los sentimientos machistas ni feministas, debe apegarse a los sentimientos de la ley”.
Por otra parte, respecto a la suspensión de sus derechos que como militante del tricolor poseía, Gutiérrez consideró que nada más se trata de una medida precautoria… de ser algo de más gravedad, lo hubieran expulsado. Por ello, pide que se aclaren las acusaciones en su contra, ya que le urge volver a echar pata a costa de la nómina priista‑ a servir a su partido y, por qué no, en uno que otro puesto público:
“Desde hace un año no ejerzo ningún cargo político, no estoy dentro del consejo político nacional, me parece una acción precautoria que está tomando la comisión, los miembros saben que no hay nada en el expediente”.
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