Juan E. Méndez, relator contra la Tortura de la Organización de las Naciones Unidas reiteró que la tortura en México es generalizada y afirmó que las declaraciones emitidas por diplomáticos mexicanos son un ataque personal.
Recordemos que Méndez realizó una visita a México entre el 21 de abril y el 2 de mayo de 2014 y redactó un informe que presentó ante el pleno del Consejo de Derechos Humanos de la ONU a principios de marzo en el que afirmó que en México el uso de tortura es generalizado y ocurre en un contexto de impunidad.
En ese momento, el Representante Permanente de México ante la ONU, Jorge Lomónaco, rechazó la aseveración, porque según él, no corresponde con la realidad ni refleja los enormes esfuerzos que ha desplegado el gobierno federal en el tema de derechos derechos humanos.
Posteriormente, el subsecretario de Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos, Juan Manuel Gómez Robledo, descalificó las observaciones que el relator especial de Naciones Unidas sobre la tortura, Juan Méndez, hiciera sobre México, medida que fue respaldada por su jefe José Antonio Meade, secretario de Relaciones Exteriores, quien confirmó que el gobierno mexicano dejaría de colaborar con el relator Juan Méndez, porque consideraba que su informe caía en contradicciones.
Hoy, el relator de la ONU, emitió un oficio dirigido a Jorge Lomónaco, en el que afirmó que sigue abierto al diálogo y que incluso, recibió presiones para modificar el informe presentado a principios de marzo, lo que le pareció algo éticamente inaceptable.
“Ha sido con mucho pesar que arribé a esa conclusión, pero lo he hecho bajo el entendimiento de que su gobierno me invitó a conducir una visita para que realice una evaluación sincera de la situación, y no para minimizarla o presentarla bajo la mejor luz posible. Hubiera sido una falta de ética de mi parte haber sucumbido a presiones que recibí en ese primer momento para que cambiara de parecer, del mismo modo que sería una falta de ética cambiar mi parecer al redactar el informe o incluso ahora cuando toda la evidencia de que tengo a disposición solamente ratifica mi evaluación”.
Méndez asegura que nunca había sido cuestionada su ética, por lo que considera como un ataque personal las declaraciones del canciller José Antonio Meade y el subsecretario de Derechos Humanos, Juan Manuel Gómez Robledo. Describió punto por punto en qué se basa su argumento de que en México existe tortura de manera generalizada.
Asegura que su informe está basado en 14 casos en los que se violentaron los derechos de 107 mexicanos, lo cual es mucho más que la cantidad de casos enviados a cualquier otro país en el curso de un solo año.
El relator aclara que la “naturaleza generalizada de la tortura” se basa en que todas las fuentes coinciden en que la tortura ocurre durante las primeras 24 a 48 horas de la detención y terminan cuando la persona es consignada.
El relator finaliza la carta, solicitando a Lomónaco que se le permita regresar en 2015 o 2016 para dar seguimiento a sus recomendaciones y el estado de su implementación.