Esta semana la revista Proceso vio cómo se dio una compra masiva en algunos puntos del país, al parecer, por desgracia, esto no se debe a las razones correctas.
Todos los ejemplares del semanario Proceso que en esta ocasión presenta en portada al gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila, acompañado de la cabeza “Estado de México Disputa Sangrienta”, fueron comprados de manera masiva en la entidad mexiquense, además del DF y en Guadalajara, Jalisco.
De acuerdo con los voceadores, personas no identificadas llegaban a los puestos y, más que ansiosos, solicitaban: “Quiero todos los ejemplares que tengas de la revista Proceso”… pagaban en efectivo y se iban del lugar.
Esta situación –la cual no es tan novedosa, ya ha ocurrido en otras ocasiones- indica el surgimiento de la “Procesomania” o probablemente tiene que ver con el revelador reportaje que en el número correspondiente a esta semana se presenta, cuyo epígrafe es “En el gobierno de Eruviel Ávila, como antes en el de Peña Nieto, las narcobandas se matan por el botín mexiquense”.
La aparición de los “compradores compulsivos” se dio en la ciudad de Toluca y en casi todos los municipios que son vecinos del DF, por lo que los lugares donde usualmente se puede adquirir el semanario (tiendas, supermercados, puestos de periódicos) se quedaron “misteriosamente” sin el número 1950 del semanario. El mismo hecho ocurrió en varios puntos del DF.
Por otra parte, en Guadalajara, Jalisco la compra masiva de la revista se dio también. El probable motivo es la aparición del reportaje titulado “Fiscalía General, sombras y dudas”, en el que se documenta la creciente vinculación del crimen organizado con la policía de la entidad.
Esta semana Article 19 ha dado a conocer datos sobre las agresiones que se cometen contra periodistas en el país. Aunque de una manera sutil, esta también es una forma de callar la voz de quienes nos informan. La mejor noticia que puede tener una revista es que se agotan sus números, pero no de esta manera.