Por: Aarón Cortés
La popularidad de Reyno ha crecido desde que en 2014 lanzaron su primer sencillo “Dos Mundos”, comenzando su primera gran gira como el telonero de Zoé. Bajo estos términos, tomaron la decisión de grabar su primer álbum en vivo antes de terminar el año, con temas de sus dos discos –Viaje por lo Eterno y Dualidad– invitados especiales, y un formato completamente distinto en el que aún están trabajando.
Aprovechando la situación, platicamos con Pablo Cantú, la mitad de Reyno encargada de las percusiones y coros. Él nos reveló algunos de los planes que tienen para los próximos meses, cómo ha fluido el proceso de grabación de su tercer álbum, así como los cambios que han ocurrido en su carrera desde un par de años.
Han sido días ocupados para Christian y Pablo con las grabaciones de su nuevo disco, el video de “Química” en camino, sesiones especiales, y lo más importante, su primer álbum en vivo. El Auditorio Blackberry abrirá sus puertas el próximo 10 de diciembre en uno de los eventos más relevantes para su carrera. La idea principal es que no existan descansos entre canciones y alargar los pasajes instrumentales para unir todo en una sola pieza.
“Relacionar varias de las canciones, extender pasajes instrumentales, algo que ya veníamos haciendo en la gira, pero necesitamos hacerlo de una forma más estructurada para tratar de tener al espectador como en todo un transe de principio a fin. Pero solo de la primera parte. Se tienen que hacer varias adaptaciones. Se graba en vivo el disco de entre ocho y diez canciones, y ya luego tomamos un respiro para poder salir a la celebración y continuar con un concierto más normal”.
Con el estreno de Dualidad hace un año han estado recorriendo todo el país, presentándose en distintos lugares, grabando cada concierto con cámaras GoPro, para después utilizar el material en un par de videos. Aunque por el momento su venue favorito es la Ciudad de México, ya que experimentan con el hecho de que más personas lo visitan, y de ahí sacan ideas para las demás fechas.
Claro que todo el cariño que el resto de sus fans del interior de la república les han brindad, también es bien recibido.
El juego ha cambiado de una forma muy rápida para este par de músicos. En menos de dos años pasaron de ser un grupo invitado/abridor de artistas como Zoé o Enjambre, a tener su propio lugar dentro de los actos más reconocidos del momento. Pero esto no sucedió de la noche a la mañana, ya que trabajaron constantemente en planear cada movimiento para realizarlo a la perfección.
“Pararte en el Foro Sol y abrirle un show a Zoé con 45 mil personas y mantener a la gente entretenida es una cosa. Tener tu propio show y tener el aguante para tocar es una cosa que no habíamos hecho y hacer un buen setlist con buena dinámica que no agote. Si algo es un acierto en Reyno es que no nos tomamos a la ligera ninguna oportunidad, así sea en tele tocar una canción –y lo hicimos hace poco con René Franco– ensayamos para eso, lo planeamos y hacemos cada movida a la medida”.
A pesar de todo esto, ellos consideran que su popularidad no es lo más importante. Los resultados se deben a todo el trabajo y esfuerzo que han realizado los últimos meses, y se ve reflejado en la cantidad de personas que ahora asisten a sus shows. Sin olvidar en ningún momento de dónde vienen, sabiendo apreciar desde shows pequeños, hasta escenarios masivos.
“Nuestro motor es totalmente artístico y hemos aprendido a apreciar públicos pequeños y públicos más grandes. A nivel interno se sienten más cambios. La experiencia de tantos escenarios en poco tiempo, una gira propia, el flow entre Christian, yo y la banda que tenemos en vivo, todo el crew es muy agradable, la estamos pasando muy bien y es lo que queremos plasmar en el tercer álbum”.
A la par de todos los proyectos en vivo, quieren tener lo más pronto posible su próximo álbum, aprovechando el hecho de que han encontrado la fórmula perfecta para trabajar en equipo. Pablo se dedica a la producción, mientras Christian está detrás de la composición y arreglos.
Llegar a este punto de su carrera como músicos no fue nada fácil, decido a que en un principio existió una sana rivalidad al no saber cuáles eran los frentes que cada uno dominaba mejor, tratando de superarse en lugar de complementarse. Pablo trabaja en los bajos, Christian se toma la libertad de grabar las voces desde su casa, y en caso de que exista una sugerencia para mejorar el trabajo del otro, la escuchan con atención para obtener un mejor resultado.
Esto también ha impulsado a un crecimiento en sus shows, añadiendo más músicos a los conciertos para crear una mejor experiencia auditiva y no quedarle a deber a nadie.
“No queriamos repetir lo que fue el primer disco. Siempre hacemos lo mejor que podemos con lo que tenemos, y en ese entonces era una formación de tres. No fue falta de ganas de ponerle violines y más guitarras y eso, sino que era lo que había. Y para el segundo disco fue la primera oportunidad que tuvimos Cristian y yo de grabar todo, metimos un montón de cuerdas, grabamos capas y capas de sonido y para plasmar eso en vivo necesitabamos más músicos y así fue”.
La industria musical actualmente enfrenta grandes problemas entre los que se encuentra la competencia del tradicional formato físico, que ha perdido ventas gracias a la era digital y los servicios de streaming. Es por eso que la mayoría de los artistas emergentes prefiere manejar todo por su propia cuenta y unirse al camino independiente para lanzar su trabajo y obtener mayor provecho de las ganancias. Dejando de lado que esto implique menos difusión (sólo en algunos casos).
Reyno decidió hacerlo de la manera convencional y firmó con una gran disquera, asegurando que esto puede ser algo de lo que puedes tomar ventaja como artista sin afectar tu trabajo.
“Las disqueras ya no son ese enemigo que nos pintaron. Hubo una etapa en la historia de la música donde evidentemente se explotó a los músicos de una forma salvaje de y ahí vienen esas ideas, pero ahorita hay un desplome evidente en esa industria por la falta de venta de discos y toda la adaptación a eso. Yo lo que creo es que son aliados, de pronto ser independiente hay gente que creo que acaba de pronto muy sola, yo creo más bien que hay que saber encontrar los elementos adecuados para optimizar los procesos y tener buenos resultados”.
Finalmente comentaron que prefieren llevársela tranquila en cuanto a gastos se refiere, eligiendo con sabiduría los lugares en los que van a tocar, dándole prioridad a aquellos en los que pueda asistir más gente. Con un paso adelante al lanzamiento del misterioso material, tienen escritos los guiones de algunos videoclips en esta nueva etapa, y seguirán buscando tantas oportunidades como sean posibles con el tiempo debido.
¿Con qué nos sorprenderá Reyno en el Auditorio Blackberry?