Los problemas del Samsung Galaxy Note 7 han llegado hasta las aerolíneas en Estados Unidos: ya no se permitirá abordar el avión si tienes uno de estos smartphones en tu posesión. Ni aunque estén apagados. Esta determinación fue tomada por la Administración de Seguridad de Tuberías y Materiales Peligrosos, la Administración Federal de Aviación (FAA) y el Departamento de Transporte.
La prohibición entrará en vigor a partir del 15 de octubre y de acuerdo con la orden, los teléfonos serán confiscados a las personas que intenten abordar sus vuelos con un Note 7 en sus bolsillos o en sus maletas. Y aquellos que traten de meterlos de contrabando, podrían enfrentar cargos criminales. Sin embargo, el procedimiento con el que las aerolíneas tratan de proseguir aun no está del todo claro.
La FAA ya había recomendado a los pasajeros que apagaran sus dispositivos y evitaran cargarlos durante los vuelos. El Galaxy Note 7 es considerado un material prohibido y peligroso de acuerdo con regulaciones federales. Los servicios de paquetería FedEx y UPS habían comentado previamente a la cadena Bloomberg que no transportarían los teléfonos por vía aérea.
En Europa la situación no ha sido muy distinta: la Agencia Europea de Seguridad Aérea lanzó una advertencia general el pasado 9 de septiembre en la cual exhortaba a pasajeros y miembros de la tripulación a mantener apagados estos dispositivos, no cargarlos mientras se está a bordo de la nave y no colocarlos dentro del equipaje facturado, según El País.
Samsung y la Comisión del Consumidor han retirado del mercado los smartphones, por cerca de 100 reportes de calentamiento, incendio y explosión causados por las baterías defectuosas. La compañía vendió cerca de dos millones de este modelo en suelo estadounidense, y tras las denuncias iniciales, ofreció reemplazos de las baterías, que tuvieron los mismos defectos.