Como cada año, en Sopitas.com me dieron la cámara y me dijeron: vete a cubrir la marcha. Así que muy tempranito me fui hacia el Ángel de la Independencia para ser uno de los más de 30 mil ciudadanos que se unieron a la 37 marcha del orgullo Lésbico, Gay, Bisexual, Trasvesti, Transgénero, Transexual e Intersexual de la Ciudad de México.
Como se sabe esta marcha especialmente se esperaba enorme, y es que tanto los organizadores lograron reunir marcas internacionales, empresas mexicanas, medios informativos y organizaciones sociales, creando un músculo fuerte de convocatoria.
Como tuvimos varios hechos importantes para salvaguardar la equidad en nuestro país: la histórica decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de considerar inconstitucionales las leyes de los estados que mantenga aún que el matrimonio solamente es la unión de hombre y mujer y la ley de identidad de la Ciudad de México que permite que los y las ciudadanos trans puedan cambiar su identidad sin necesidad de esperar la decisión de un juez, todo esto enmarcado con el entusiasmo internacional de la legalización del matrimonio igualitario en Estados Unidos.
Así que llegué a la Glorieta de los Insurgentes y lo primero que me encontré fue que desde temprano mucha gente ya estaba comenzando a llegar (además, el lugar estaba lleno de vendedores de banderas, corbatas, pulseras, collares y miles de objetos más que tenían los colores del arcoiris).
Otra cosa interesante es que encontré a trabajadores del gobierno de la Ciudad de México encuestando a las personas de este sector de la población, tomé una encuesta (que estaba hecha con la colaboración de la UNAM) y las preguntas eran muy interesantes, pues se le pedía a la gente que dijera desde si conoce las instituciones y leyes que los protegen y respaldan hasta si han sufrido casos de discriminación, violencia o acoso en instituciones públicas, privadas o en espacios públicos o comerciales. También cuestionaban nuestra preocupación por los miembros de la comunidad que además son indígenas, personas de la tercera edad o con capacidades distintas.
El ejercicio se me hizo interesante porque fue la primera vez que vi de primera mano al gobierno del DF aprovechando este tipo de eventos para abrir un canal de comunicación y saber cómo está este sector de la población:
Como siempre los negocios cercanos se vistieron de colores, no hay que olvidar la importante derrama económica que genera esta marcha que atrae no sólo a capitalinos, sino a personas de toda la república y hasta personas extranjeras.
Y bueno, llegué al Ángel.
Como les dije al principio, al frente estaban miembros de la comunidad trans. Aquí pueden ver los colores de su bandera:
Aquí están con su cartel a la cabeza de toda la marcha:
Desde las 10 de la mañana varios espectáculos tuvieron lugar en el templete que estaba instalado al frente del monumento más característico de nuestra ciudad:
Como cada año, las campañas de salud que regalan preservativos estuvieron presentes.
No hay que olvidar que el Movimiento LGBTTTI tanto en México como en el mundo, fue de los primeros que exigió una educación sexual y este tipo de campañas que ayudan a la población a informarse y prevenirse de infecciones de transmisión sexual.
Además, es sabida la importancia que se tiene de la concienciación de la población sobre enfermedades como el VIH para eliminar la estigmatización de las personas. 
Y bueno ya me metí entre la gente y me encontré a todo tipo de expresiones de la diversidad:
Y es que esta marcha siempre ha servido para transgredir todos los estàndares y poner en cuestión lo que nosotros consideramos normalidad. Además es una manera de decirle tanto a la sociedad como al Estado que el que es dueño de su cuerpo es uno.
Cada quien se debe expresar de la manera que quiera:
Algo hermoso es que este año vi a muchísimas familias apoyando a sus seres queridos. Por ejemplo toda está familia salió a mostrar su cariño y apoyo a su hijo/hermano/tío/novio trans:
También hubo ciudadanos heterosexuales que salieron a mostrar su respaldo a los sectores LGBTTTI.
Y bueno, lo interesante es que por primera vez vi abiertamente a varias marcas que se vistieron de colores para sustentar su espaldarazo a esta comunidad:
Cada año varios partidos intentan ganar votos llevando contingentes y hasta candidatos a la marcha. Este año no fue la excepción, aunque lo irritante del caso es que, mientras en Estados Unidos políticos apoyan los derechos de sus ciudadanos LGBTTTI (de la talla del presidente quien después de la decisión de la Suprema Corte de allá, hizo un discurso en apoyo a esta decisión y por la igualdad de derechos), en México no hubo grandes pronunciamientos, ni por parte del PRI ni siquiera por parte de la izquierda (ya no hablemos de líderes conservadores como Madero o hasta López Obrador quien, a diferencia de lo que dice y hace su partido, ha dicho que no considera “tan importantes” las luchas civiles de esta parte del pueblo mexicano).
Por eso resulta molesto que no se pronuncien pero que cada año marchen en busca de simpatizantes.
Pero bueno, sigamos en la parte bonita de la marcha: aquí tienen charros
Gracias a la buena organización de este año, pudimos volver a ver varios carros con música.
Obviamente los carteles de protesta estuvieron salpicados a lo largo de toda Reforma:
Algunas personalidades mexicanas se unieron a la Marcha, tal es el caso de Fernanda Tapia, a quien nos la encontramos arriba de uno de los camiones que desfilaron:
O la bella Tongolele:
Aquí tenemos algunas reinas de belleza:
Y a los siempre queridos osos:
Los contingentes vienen de todo el país:
Y son de todo tipo, desde polìticos, empresariales, sociales y hasta religiosos (porque no hay una forma de ser gay, bi, lesbiana o trans, todos somos diferentes):
Por cierto, y cambiando absurdamente de tema, aquí está la pájara Peggy:
También estuvo Sabrina (y sí, hizo que todos gritaran “Lámeme la pu$%& pinc%&& pu·$&5″…de hecho, su carro fue uno de los más divertidos):
Familias homoparentales disfrutaron de este día:
Y también se unieron familias con padres heterosexuales:
Y bueno, aquí pueden darse un poco la idea de lo inmensa que fue la marcha. Esta es la gente que rodea algunos de los mucho carros que hubo (ya en el Zócalo podías regresarte y la gente seguía y seguía llegando):
Aquí estaba llegando al Zócalo:
Y para que vean que vienen personas de todo el mundo, este joven vino desde Corea del Sur:
En el Zócalo se pudieron escuchar artistas gayfriendly que tienen un cierto lugar especial dentro de la comunidad (tradicionalmente hablando) como la Tesorito o hasta hubo un reencuentro de Jeans:
(Como ven, no alcance a colarme hasta el frente).
Este año la marcha se vio rebosante, el color y la atmósfera que reinó en toda ella mostró algo que es definitivo: el lugar que cada ciudadano de este sector está conquistando dentro de la sociedad mexicana (ya no más como ciudadanos de segunda). Y sí la lucha aún continúa, la igualdad aún no ha llegado plenamente. Todavía falta que muchas instituciones en todo el país comiencen a ser inclusivas y muchos derechos y servicios para comunidades como la trans, la intersexual, etcétera, además de la marginación y la vulnerabilidad en la que están las personas inmigrantes LGBTTTI, los indígenas o la gente de los sectores más humiles.
Pero poco a poco, después de 37 años, se ha podido ver el cambio significativo dentro de la sociedad mexicana, son grandes pasos los que se han dado, esperemos que el camino a la igualdad sea cada vez más corto en nuestro país.