Antes de que Aurelio Nuño presumiera que el candidato del PRI a la presidencia está más limpio que el tanque de un auto después del gasolinazo, esto en el programa con nombre que se presta al albur conducido por López-Dóriga, los diputados priistas ya habían comenzado la reparación de los daños provocados por el destape de (más) desvíos operados desde la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol)… dependencia de la que el buen José Antonio Meade fue titular.

La desaparición de más de 6 mil millones de pesos del gobierno federal… pues sí se ve medio gacha, pero no hay que adelantarnos a juzgar a los integrantes de la actual administración (cof, o al candidato presidencial que salió de ella, cof), porque aún no es definitivo que se hayan chin$%&ado tanta billetiza. Así lo sugirieron los legisladores del tricolor, luego de que la propia Auditoria Superior de la Federación (ASF) diera a conocer el resultado de sus revisiones a las cuentas públicas. “De este informe son asuntos todavía no concluidos, no podemos de entrada decir que hay un desvío de dinero porque el procedimiento apenas está iniciando”, justificó el diputado Edgar Romo.

El también presidente de la Cámara puso especial énfasis en el caso de los 2 mil millones que supuestamente se desviaron de la Sedesol (¿por qué habrá sido?), indicando que la secretaría de la que Meade fue titular tendrá un plazo de 30 días a partir de que la Comisión de Vigilancia le entregue su informe para remendar sus cuentas. Así, ya conociendo las supuestas irregularidades, se podrá inventar gastos, digo aclarar, solventar o no solventar los señalamientos. “Hoy no podemos determinar culpables, hoy no podemos determinar si realmente existen o no los desvíos, porque apenas inicia el proceso. Son asuntos no concluidos”.

Y bueno, aunque el supuesto desvío se habría operado durante la administración de Chayito Robles… queda una duda: ¿cómo es posible que tal boquete financiero no haya sido detectado por quien fue su muy preparado y astuto relevo? Pues bueno, de acuerdo con el propio Pepemit, él hizo su parte para intentar tapar la transota de su predecesora, digo, para dejar buenas cuentas. Para ello, según el ahora aspirante a Ejecutivo, realizó una investigación al interior de la Secretaría y, después de detectadas unas que otras irregularidades, procedió a sancionar… obviamente no a peces gordos, sino a cientos de Godínez. “A mí me tocó, cuando estuve (como titular) en la Secretaria de Desarrollo Social, hacer una investigación que se tradujo en que suspendieron a casi 500 servidores públicos”.

Aunque lo anterior suena a un “a mi no me estén chin%&/ando, porque esa no es mi bronca”, Meade aseguró que los deslindes le corresponden a la ASF y la PGR, por lo que él esperará a que se den las investigaciones… que bueno, así como van los tiempos, muy posiblemente tendrán resultados hasta después de las elecciones.

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