Aunque la mayoría conoce al sagrado lugar como Teotihuacán y punto… hay quienes buscan adornarse con el turista extranjero y, para referirse a la ciudad mexica, recurren a su traducción en el original náhuatl: “lugar donde los hombres se convierten en dioses” o “Ciudad de los Dioses”. Sin embargo, nuevos estudios sugieren que esto es un error.
De acuerdo con un comunicado emitido por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Teotihuacán no es la “Ciudad de los Dioses”, sino la “Ciudad del Sol”. Esta nueva propuesta se realiza a la luz de estudios epigráficos e iconográficos de documentos que datan del siglo XVI (el Códice Xólotl, principalmente), los cuales sugieren que los pueblos que arribaron al valle, por ahí del siglo VIII, lo nombraron Teo uacan, es decir, la “Ciudad del Sol”.
Los expertos señalan que la nueva denominación refiere a que ahí -en Teotihuacán- “se nombraba al Sol, el legitimo gobernante”, tal como lo sugieren estudios realizados al códice Xólotl, en el cual se abarcan cerca de 400 años de la región y, pa’ variar, se encuentra en el extranjero: n la Biblioteca Nacional de París, Francia.
Teotihuacan no fue la Ciudad de los Dioses, sino la Ciudad del Sol #INAH https://t.co/BNnmLcksCy pic.twitter.com/iIq4k7KJbp
— Historia México (@historia_mexico) 23 de enero de 2018
En fin, el caso es que, en dicho códice, “se rastrearon los glifos que hacen alusión a Teotihuacan en los diversos eventos que marcaron el devenir de esa región”. Así, siguiendo la cronología de los gobernantes texcocanos, se pudo contar con “un respaldo temporal que pudiese ser contrastado con otros documentos y crónicas, tanto de la época del contacto con los españoles como novohispanos”.
Según recordaron los investigadores Verónica Ortega, Edith Vergara y Enrique del Castillo, la ahora “Ciudad del Sol” fue fundada en el año 100 antes de Cristo y fue, en su momento, una gran metrópoli sagrada. El nombre ahora “descubierto” habría sido otorgado por los pobladores que llegaron a la urbe, luego que esta había sido abandonada por sus pobladores originales, agrega el comunicado del instituto especializado en antropología. Hasta ahora se desconoce los orígenes y pobladores de las míticas pirámides, referentes del punto ubicado en el ahora Estado de México.