Hay imágenes indignantes que nunca nos gusta ver, pero cuya difusión es necesaria para crear conciencia y evitar que se repitan. Éste es el caso de un video sobre el brutal maltrato que recibió un trabajador en Arabia Saudita.

El empleado doméstico de estas imágenes amateurs es un inmigrante al que su patrón golpea de una forma salvaje, todo porque creía que el trabajador había tratado de hablar con su esposa.

“¿Por qué viniste aquí cuando ella estaba?”, pregunta molesto el empleador, al que poco le importó escuchar la explicación del trabajador: “Juro que no tuve intención, juro por Dios que no lo sabía”.

El abuso llegó a tal grado, que el empleado fue escupido, obligado a arrodillarse y golpeado con un cinturón.

Ojo, el video puede contener imágenes fuertes, por lo que les pedimos discreción.

Tras la difusión de este video amateur, las autoridades aún no están del todo seguras del lugar en el que ocurrieron los hechos, pero por el acento del patrón se sospecha que pudo haber sucedido en Riad. Por su parte, la Comisión de Derechos Humanos del Gobierno se mostró consternado por lo ocurrido, así lo hizo saber Mohamed al Madi, miembro de esta comisión:

“Nos estamos tomando esto muy seriamente y estamos investigando junto con la seguridad saudí. Estamos haciendo todo lo posible para asegurar que el abusador es arrestado y juzgado. También estamos haciendo todo lo que podemos para encontrar al hombre que ha sufrido los abusos, con el fin de ayudarle”.

Lamentablemente esto no es nuevo, desde hace años hay trabajos periodísticos e informes de organizaciones defensoras de derechos humanos que han documentado los abusos que sufren los migrantes provenientes de África y Asia, no sólo en Arabia Saudita, sino también en otros países del Golfo.

Bajos salarios, restricciones, falta de pago, horarios de trabajo excesivos, ausencia de días de descanso y maltrato son algunas de las condiciones lamentables por las que pasan estos trabajadores domésticos.

Una de las razones por la que los empleados soportan esta situación, es el “Kafala”, que es un sistema laboral establecido en el Golfo Pérsico, que les otorga la residencia y permisos de trabajo a los migrantes sólo si el patrón da su consentimiento, lo mismo ocurre cuando quieran cambiar de trabajo o salir del país.

Tan sólo en Arabia Saudita trabajan más de nueve millones de migrantes, los cuales representan más del 50% de la fuerza trabajadora de esa nación. Actualmente, la Organización Internacional del Trabajo define como esclavitud moderna a este tipo de explotación.

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