Bueno, al menos parece que todo el movimiento de los últimos dos días le sirvió para conocer los conceptos básicos.
Luego que Donald Trump hiciera el anuncio formal de la construcción del muro fronterizo y las alternativas para financiarlo, nuestro canciller, Luis Videgaray ofreció sus respectivas impresiones. En rueda de prensa, acompañado por su homólogo de Economía, el hombre que llegó para aprender, señaló que si Estados Unidos pretende levantar su muro, es su bronca… pero pretender que México pague por él, eso ya es otro asunto.
“Reconocemos en Estados Unidos una nación soberana con pleno derecho a proteger sus fronteras conforme lo decida el pueblo y el gobierno. No coincidimos en que el muro sea la mejor manera de proteger o generar una buena convivencia entre vecinos, pero pueden defender sus fronteras como mejor les parezca. Pero de ahí a pretender que sea el pueblo de México el que pague por un muro es pasar de una acción soberana a algo que es profundamente inaceptable”.
Aunque ayer por la mañana el presidente norteamericano fue muy tajante al señalar que si México no quiere pagar el muro, entonces no tiene caso sostener un encuentro, el de la Secretaria de Relaciones Exteriores dijo esperar que las reuniones “de alto nivel” se restablezcan en las próximas semanas. Para él, todavía ni siquiera se llega al grado de las negociaciones.Lo que se esperará es que se den las condiciones para, ahora sí, acordar un encuentro entre los mandatarios de ambos países.
“Reiteramos la voluntad indeclinable del gobierno de México de seguir en comunicación estrecha al más alto nivel con el gobierno de Estados Unidos, vamos a seguir negociando y vamos a llegar a muy buenos acuerdos”, agregó el optimista secretario.
Como ayer les informamos, ya que el presidente de México, Enrique Peña Nieto, nuevamente rechazó que nuestro país vaya a pagar por el muro fronterizo, en EEUU se propuso que otra forma de obtener los recursos podría ser cobrando un impuesto del 20% sobre todas las mercancías mexicanas importadas. Sobre esto, Videgaray comentó lo que desde especialistas hasta gente “de a pie” pueden ver: de aplicarse ese impuesto, quien terminaría pagando es el consumidor local. O sea, los gringos.
“Un impuesto a las importaciones de EU a productos mexicanos no es manera de hacer que México pague por el muro, sino el consumidor norteamericano, que pagaría más caros los aguacates, las lavadoras, las televisiones”.
De acuerdo con The New York Times, la “genial” idea del impuesto a las importaciones salió de legisladores republicanos. Sin embargo, al ver que no sólo sirvió para criticar a Trump, sino para burlarse de él, dadas las repercusiones de tal medida, el secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, tuvo que moderar sus comentarios.