Con tanta alerta de saqueos, el miedo y el coraje están al alza… pero siempre nos quedaba el clásico remedio del bolillo, pues pa’ recoger la bilis. Pero ahora ya ni eso.
De acuerdo con advertencias de industriales del área cuya materia prima es el maíz y el trigo, tanto el pan como la tortilla podrían sufrir considerables incrementos en su precio, nomás para no poner ni tantita resistencia a la potente cascada de aumentos derivados del “gasolinazo”.
En voz del presidente de la Unión Nacional de Industriales de Molinos y Tortillerías, Lorenzo Mejía, se molerá al bolsillo de quienes gustan de echar taco con un incremento de hasta el 30% en el kilo de tortilla. Sólo es cuestión de que se pongan de acuerdo después de considerar todos los elementos implicados en la producción y distribución del alimento básico.
“En el caso de nosotros (dueños de molinos y tortillerías) tenemos aumento en electricidad, gas, gasolina, agua, y ya nos dijeron los productores de maíz que el precio va a subir”, dijo para Diario Reforma.
Ya, en lo que toca al pan, Amador Méndez, vicepresidente de la Asociación Nacional de Proveedores Profesionales de la Industria del Pan, Repostería y Similares (Anpropan), señaló que a ellos lo que les afectará (y por consiguiente a los consumidores) será el alza del trigo.
Adiós guajolotas…
Aunque todavía no saben bien cómo les fue con el trancazo del alza a los combustibles, se está considerando que las conchas, los cuernitos, los birotes y toda la variada gama de panes podrían tener un incremento en su precio del 22%. Con esto, por ejemplo, el bolillo pasaría de 1.80 a 2.20 pesos.
Además de ser afectados por el alza a la gasolina, los especialistas del pan justificaron que, así como varios de los productos que se venden en el país y sentimos taaan nuestro, el pan tiene como materia prima un elemento proveniente del extranjero: el trigo. Noventa por ciento de él es de importación.