Karma y otras cosas de la vida. Ayer se dio una noticia que conmocionó al mundo del baloncesto. El poste Andrew Bogut, exjugador de los Golden State Warriors, firmó con los Cleveland Cavaliers pero sólo pudo jugar 58 segundos en su debut pues se fracturó la tibia. La lesión del jugador causó gracia entre los seguidores del baloncesto, quienes habían percibido el hecho de que Bogut se fuera a Cleveland como un traición.
Hace unos días Kevin Durant dejó al OKC Thunder para firmar con los Warriors. Al principio de la temporada también sufrió una lesión que lo tendrá fuera al menos el resto de la temporada regular, por lo que ambas bajas fueron percibidas como una obra del ‘destino’ por decirle de alguna manera.
Anoche el Miami Heat enfrentaba a los Cleveland Cavaliers en el Quicken Loans Arena. Con los visitantes arriba en el marcador el Heat intentó un triple y Andrew Bogut salió de la pintura para tratar de bloquear el disparo. Sin embargo, el poste no pudo y de inmediato comenzó a arrastrar la rodilla. El poste se fracturó la tibia y el séquito del ‘Rey LeBron’ vuelve a estar incompleto.
Bogut comenzó esta temporada con los Dallas Mavericks y después fue cambiado de equipos como uno cambia de calcetines. El poste pasó los 76rs y luego al Magic y finalmente quedó como agente libre. Bogut firmó con los Cavs para brindarles la altura y juego interno que los de Tyronn Lue habían perdido con la lesión de Kevin Love, pero ya no le salió la jugada.
Si tanto Kevin Durant como Andrew Bogut terminan por no jugar los playoffs ni las finales, los refuerzos de ambos equipos que “traicionaron” a sus respectivas exescuadras habrán sido en vano. Ojalá que ambos se recuperen pronto. Aunque por el momento no se puede dejar de lado el hecho de que los dos controvertidos basquetbolístas terminaron lesionados tras firmar con sus nuevos equipos.
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