Checo Pérez y Red Bull en general tuvieron un sábado muy complicado en el Gran Premio de Hungría. El mexicano largará onceavo en la carrera y Max Verstappen décimo, mientras Ferrari ocupará las primeras dos filas.
George Russell le robó la pole a Carlos Sainz con una vuelta espectacular que sorprendió a todos en el Hungaroring y Mercedes luce cada vez mejor. Sin embargo, Checo Pérez no encuentra balance y comodidad en su RB18, algo que se combina con factores externos.
El tapatío explicó que en la qualy de Hungría encontró tráfico, concretamente con Kevin Magnussen de Haas en su segundo intento. Y considerando que Hungría no es una pista en la que brillen las maniobras, Checo tendrá una misión complicada en busca de los puntos.
“En mi segunda vuelta me encontré a Magnussen en la curva 2 y tuve que ir muy adentro, perdí bastante tiempo. Al final no pude recuperar.
“Ha sido un fin de semana complicado hasta ahora. Mañana lo intentaremos, es una carrera larga; sin duda que pasar aquí es muy difícil, pero intentaremos sumar algunos puntos“, declaró Checo Pérez muy molesto al finalizar la Q2.
La frustración de Verstappen tras su resultado junto a Checo Pérez
No solo Checo Pérez se fue molesto de la qualy en Hungría. Max Verstappen tampoco pudo ocultar su enojo al quedar último en la Q1 y perder la posibilidad de pelear por la pole. En este momento, la diferencia entre Red Bull y Ferrari en el campeonato de constuctores es de 82 puntos y Sainz está a 19 del tapatío.
Los problemas de Red Bull ya no son exclusivos de Checo y habrá detalles por mejorar de cara a la carrera; además, habrá un gran análisis durante el parón de verano.
