Casi nunca se habla del tenista 117 del mundo y con razón. El tenis es un deporte que en ocasiones se le considera elitista y que siempre ganan los mismos, pero en ocasiones hay historias que son dignas de contar. Lo que acaba de pasar con Denis Istomin y Novak Djokovic es de reconocerse, sobre todo por el pasado del nacido en Rusia.

Istomin, además de haber derrotado a Djokovic superó lo que pudo ser un tragedia en su infancia y así, dar una demostración de que con esfuerzo toda meta es alcanzable.

Cuando tenía 14 años el muchacho que tomaría la nacionalidad uzbeka se vio involucrado en un accidente automovilístico, mismo que casi le quita la pierna izquierda. En ese momento era una de las promesas más emocionantes del tenis mundial, pero todo quedó en espera después de este grave suceso.

Un camión dejó a Denis con la pierna atrapada entre los asientos y si no hubiera llegado la ambulancia a tiempo, hasta la vida hubiera perdido. Sin embargo, la recuperación fue muy complicada e involucró dos años sin poder jugar, 80 puntos para suturar y tres meses de estancia en el hospital.

Años más tarde, Istomin declaró al Clarín: “Nunca pensé que volvería a jugar al tenis”.

Ahora, con 30 años y ya una carrera bastante decente acaba de dar la primera sorpresa del 2017 en la ATP. Eliminó a uno de los mejores tenistas de toda la historia en un verdadero partidazo. Sin embargo, es casi seguro que su mejor triunfo fue y será esa gran recuperación que tuvo cuando tenía 14 años.

***Fotos Getty Images

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