La NBA es muy estricta en cuando a romper el reglamente se refiere, de ahí que ya comiencen una amplia investigación contra Dwight Howart por el uso de una sustancia prohibida para sacar provecho durante un encuentro de la liga.
Los Rockets se midieron contra Atlanta en un partido que tuvo un toque especial, ya que en el momento en que Paul Millsap se disponía a cobrar un falta, se dio cuenta que el balón estaba pegajoso y decidió dárselo al árbitro para revisión.
De inmediato el colegiado corrió rumbo a las bancas de los equipos, todo para dejarles ver que si utilizaban el llamado stickgum serían sancionados ya que esta es una sustancia que no puede usarse.
Entre todo este movimiento el centro estaba lejos, no hacía mayor aspaviento y cuando las cosas vuelven a la duela, se puede ver cómo platica un poco con un árbitro mientras se limpia las manos en sus shorts.
No sé por qué se está armando tanto rollo. Lo uso en cada partido.
Estas fueron las palabras del jugador posterior al encuentro, razón suficiente para que la NBA comience una investigación en su contra y puedan darle una sanción merecida.
