Cruz Azul ha perdido a una de sus más grandes figuras, se trata de Héctor Pulido, quien fuera apodado por Ángel Fernández como “el ocho pulmones”. Pulido falleció a la edad 79 años, en Ciudad Cooperativa Cruz Azul, donde comenzó su leyenda con la playera de La Máquina.
Las causas de su fallecimiento no se han dado a conocer y hasta las 13:00 horas del viernes 18 de febrero, el club no había manifestado algo al respecto de su exjugador.

El legado de Héctor Pulido en Cruz Azul
Pulido nació el 20 de diciembre de 1942 y orgulloso decía que era originario de Numarán, Michoacán. Jugaba en La Piedad y fue reclutado en Cruz Azul por el húngaro Jorge Marik, para conformar al equipo de Cruz Azul que ascendió a Primera División, en 1964, cuando el equipo aún jugaba en el Estadio 10 de diciembre.
“Fue una gran alegría para nosotros y para la gente del pueblito de Jasso. Nunca olvidaré el sonido del silbato de la cementera de la Cruz Azul a todo lo que daba, el repicar de las campanas de la iglesia… fue algo espectacular”, compartió Héctor Pulido en entrevista a Sopitas, en 2014, sobre el césped del Estadio 10 de diciembre.
“Es un estadio que guarda muchos recuerdos, lo abrazo con mucho cariño y orgullo. Los recuerdos están latentes”, explicó el Grandote de Numarán.

Cruz Azul no tuvo infancia porque nació grande
Al poco tiempo en Primera División, Cruz Azul se convirtió en uno de los equipos con más arraigo en e país y sus vitrinas se comenzaron a llenar a pesar de contar con poco tiempo en el máximo circuito, por lo que Héctor Pulido decía que Cruz Azul no tuvo infancia.
“Nació grande porque el Ingeniero Guillermo Álvarez quería que el equipo ascendiera, una vez logrado el ascenso nos pidió que lo hiciéramos grande, como a la cementera. Con sólo cuatro años en primera ganamos el primer título. Así se forman los equipos grandes, con campeonatos”.
De los nueve títulos que tiene Cruz Azul en Primera División, Héctor Pulido ganó seis, además de una copa, tres Concachampions, dos Supercopas, además del campeonato en Segunda División que valió el ascenso.

El legado de Héctor Pulido con la Selección Mexicana
Pulido no sólo fue una figura de Cruz Azul, sino que además fue parte de la Selección que jugó el Mundial de México 1970, de modo que disputó el partido en el cual México consiguió su primera goleada en una Copa del Mundo, el 4-0 sobre El Salvador, en el Estadio Azteca.
En más de 50 partidos con la Selección Mexicana, Pulido marcó seis goles, ante Chile, Etiopía, Perú y Antillas Neerlandesas. Además integró a la Selección durante los Juegos Olímpicos de México 1968, en los cuales el Tri obtuvo el cuarto lugar.

Tras su retiro en 1979, con el Jalisco, Pulido regresó a su querido pueblito de Jasso, que desde hace varias décadas es conocido como Ciudad Cooperativa Cruz Azul, de modo que el Grandote de Numarán falleció y descansa en casa.