Por Miguel Ángel Delucio

En la NBA tenemos a estrellas que hacen mucho ruido como LeBron James, Stephen Curry, Kyrie Irving y Russell Westbrook. Jugadores que por su estilo de manejar la bola y su forma de hablar fuera de la duela los hace sumamente llamativos.

Sin embargo, hay un basquetbolista que se ha ganado el reconocimiento y los reflectores por todo menos por su llamativa personalidad. Es el alero de los San Antonio Spurs, Kawhi Leonard.

El egresado de San Diego State está en la carrera para ser el MVP de la liga, pero jamás lo verán hacer un comentario de esto. Claro, no tiene la necesidad de hacerlo cuando su juego habla por si solo. La muestra más clara fue contra los Houston Rockets. Kawhi cerró el partido con un triple para tomar ventaja y después, un tapón espectacular a James Harden en los últimos segundos.

Una jugada como este pero de parte de Curry o LeBron se hubiera llevado las portadas en los diarios estadounidenses. Sin embargo, a Leonard se le dio reconocimiento, pero no al nivel de esos dos.

Y esta bien, porque no lo quiere y no lo necesita. Su forma de ser le permite hacer esto en la duela e irse a casa como si nada hubiera pasado, sin tanto escándalo, sin tanta parafernalia. Su lenguaje corporal lo dice todo: no le agrada estar frente a la prensa, pero no porque lo ataquen, sino porque cree que no tiene nada que decir.

Kawhi Leonard

¿Y por qué Kawhi Leonard es el mejor?

La respuesta es sencilla: porque lo hace todo bien. En otras estrellas podemos encontrar deficiencias. A Harden jamás se le verá defender bien, a Curry se le dificultan los tiros de media distancia, a James se le acusa de arrogante y a Westbrook de individualista.

A Leonard no le puedes encontrar falla. Es de lo mejor que hay en la liga a la hora de defender, es un tirador de triples muy eficiente y cerca del aro también es letal. La mejor comparación que se puede hacer es que Kawhi es un francotirador, un asesino que no hará jamás un movimiento en falso, no hace ruido, pero es sumamente mortífero.

Por otro lado, también hay que sumar sus números, que sin duda son de élite. Está en el top 5 de robos por partido, es el séptimo mejor en puntos anotados con 26.3 por juego, también asiste y gana más de seis rebotes por encuentro.


Por si fuera poco esta dirigido por el que probablemente pase a la historia como el mejor entrenador de todos los tiempos. Gregg Popovich ha llevado la carrera del californiano de la mano, tomó su talento y poco a poco lo convirtió en lo que ahora es.

Además, Kawhi tuvo la fortuna de tener a un maestro como Tim Duncan. En realidad, se podría decir que estos dos son muy similares en su forma de manejarse, aunque jugaron posiciones completamente diferentes.

Lo mejor de todo es que ¡apenas tiene 25 años de edad! Kawhi Leonard está en la plenitud de su carrera y aunque no se le haga tanta publicidad, es el mejor jugador en la NBA.

***Fotos Getty Images

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