Esta semana surgió una noticia que a muchos nos hizo levantar ambas cejas. Varios de los detenidos por la tragedia en el Estadio Corregidora, allá en Querétaro, quedaron en libertad.
Fueron en total 13 de los 57 detenidos quienes quedaron en libertad. Todos ellos estaban en prisión preventiva por su responsabilidad en los hechos violentos que sacudieron a la Liga MX (y a todo el país) el pasado 5 de marzo en el juego entre Gallos y Atlas.
Te entendemos, seguro lo primero que vino a tu mente tras conocer esta noticia es que seguro hubo corrupción o alguna otra falla típica de nuestro sistema de justicia. Pero por acá te vamos a decir cuál fue la razón por la que fueron liberados.
Procedimiento abreviado y libertad condicional para los detenidos por la violencia en Querétaro
Resulta que 3 implicados en lo ocurrido en Querétaro aceptaron que su situación jurídica se resolviera por “procedimiento abreviado”. Lo anterior representa una alternativa presente en el Código Penal para terminar el proceso judicial de manera anticipada.
De acuerdo con ESPN, el resto de los involucrados quedaron en libertad condicional luego de pagar una cantidad de dinero impuesta por las autoridades.
Eso sí, se reporta que ninguno de los liberados podrá asistir a un estadio de futbol en México por lo próximos 3 años. La pregunta ahora es si todo lo anterior es suficiente después de lo que pasó aquella tarde en la Corregidora.
“Existen casos que se está llevando a cabo una suspensión condicional o procedimiento abreviado, se paga la reparación del daño; una vez que sea procedente esta salida alterna reconocida en la ley procesal penal, los jueces pueden resolverla e implica que ellos puedan obtener su libertad”,
Declaró Mariela Ponce Villa, presidenta del Tribunal Superior de Justicia en el estado de Querétaro.
Las “sanciones” por lo ocurrido en La Corregidora van en descenso
Hace unas cuantas semanas, a principios de julio, La Federación Mexicana de Futbol también le redujo la sanción a Adolfo Ríos por lo ocurrido en el Estadio Corregidora. Él fue uno de los directivos de Querétaro que fue desafiliado por cinco años inicialmente, pero dicha sanción quedó en sólo 1 año.