Después de estar en el ojo del huracán durante varios días, Gerard Piqué decidió enfrentar su realidad, citó a los medios a una conferencia de prensa y explicó todos los temas de los que se ha hablado.
Silbidos, cánticos, gritos y muchas cosas más ha recibido el defensor blaugrana en las últimas semanas. Se cree que esto puede ser un tema político, por la rivalidad con el Real Madrid o por ser un “mercenario monetario”.
Esas fueron las teorías que se manejaron, pero Piqué despejó dudas al decir que esto es simplemente por el “odio” que hay entre culés y merengues, una rivalidad que se vive con intensidad en España:
Hay que preguntar a la gente, pero en mi opinión es que se debe a eso, por mis comentarios sobre el rival. Fui a la última Diada (de 2014) a apoyar el derecho a decidir, luego jugué con España y nadie me silbó. Creo que no es por la relación entre Cataluña y España. He demostrado que mi compromiso con la Selección ha sido máximo. Y sobre la rivalidad con el Madrid, no cambiaré. El que me acepte, bien; quien no, me tendrá que aguantar hasta que me retire.
El esposo de Shakira dijo no tener miedo cuando la gente le lanza una rechifla en el Santiago Bernabéu, mas sí es incómodo cuando juega con la Selección Española, pero a la vez cree que hay derecho a expresarse y lo respetará:
Para mí, que me piten en el Bernabéu es una sinfonía, pero no con la Selección. La gente tiene todo el derecho del mundo a expresarse. Intentaré darle la vuelta y, como no podrá ser con palabras, lo haré con hechos, con mi rendimiento. Si lo siento por algo es por el míster y los compañeros.
Así es como Piqué da carpetazo a todo lo sucedido en semanas pasadas, donde fue atacado por un gran sector de españoles. En la conferencia se le vio sereno, contento y hasta esbozó una que otra sonrisa.