Hambre, injusticia, discriminación. Guerras, conflictos y pobreza extrema. Si, es el 2016 y hoy más que nunca podemos decir que nuestro mundo está llamas. Los intereses políticos y económicos siguen dividiéndonos como humanidad en un patrón que podría repetirse en cuanto a la conquista espacial.
Es por ello que el empresario ruso, Igor Ashurbeyli, decidió fundar Asgardia, el primer país espacial, con el que pretende impedir que los conflictos de la Tierra, se extiendan también al espacio.
“Asgardia es el prototipo de una sociedad libre y no restringida que tiene el conocimiento, la inteligencia y la ciencia como su núcleo, junto al reconocimiento del valor último de la humanidad y de cada vida humana.”
La iniciativa es fruto de un grupo internacional de investigadores, ingenieros, abogados, empresarios y científicos con el fin de crear un marco legal para la explotación del espacio con independencia de las naciones terrestres.
El nombre, que proviene de la ciudad de los cielos gobernados por Odín de Valhalla en la mitología nórdica, y su primer gran proyecto, consiste en lanzar un satélite en el 2017 con la finalidad de encargarse de tareas de protección contra la basura espacial y el impacto de asteroides, una tarea que es mucho más compleja de lo que suena y que hasta el día de hoy, se ha combatido sin éxito por las agencias espaciales existentes.
Otra de las misiones de Asgardia, contempla la creación de oportunidades para un acceso más amplio al espacio, dando a las naciones no tradicionales un lugar para realizar sus exploraciones científicas, y es que es justo a través de la creación de este país en el espacio que los investigadores esperan desarrollar un nuevo marco para la propiedad y el desarrollo científico, basado en los tres pilares que conforman esta nación espacial: paz, acceso y protección.
La nación aún no tiene escudo, bandera ni himno. Tampoco se ha aclarado si tendrá algún tipo de gobierno o una constitución. Lo que si se sabe es que cualquier persona puede aplicar para la ciudadanía, con la esperanza de que en un futuro no muy lejano, la Organización de las Naciones Unidas reconozca oficialmente a Asgardia como una nación, que hasta el momento cuenta con 383 mil ‘ciudadanos reclutados’.