Elon Musk compró una parte de Twitter porque, según él y y una encuesta que lanzó en la misma plataforma, la red social del pajarito no es lo suficientemente democrática. Cuando uno hace una encuesta en Twitter, lo máximo que compra son las galletas o el chocolate que te tiene en un dilema. Pero Musk lanzó una encuesta para ver si compraba una red social. Casual.
Pero el tema, más allá de la compra sorprsiva de Musk, es mucho más complicado de lo que parece. ¿La razón? El debate de las redes sociales respecto a la forma en la que participa en los procesos democrárticos, es interminable, pues no sólo hemos de hablar de principios ya conocidos como la libertad de expresión y el acceso a la información, sino de aspectos culturas y sociales que se encuentran en un limbo determinado por la experiencia de los miles de millones de usuarios.
Así que hablar de democracia y redes sociales es un tema del cual, la mayoría de las personas, sólo podemos opinar. Sin embargo, hay unas cuentas personas (millonetas) en el mundo que no sólo pueden opinar, sino intentar “cambiar” las cosas. Pero acá les explicamos bien cómo estuvo la movida.
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Elon Musk compra un pedazo de Twitter
Este lunes 4 de abril, se reportó que Elon R. Musk, conocido por ser el fundador de Tesla y SpaceX, compró 9.2 por ciento de Twitter Inc. La compra llegó a una semana de que el millonario criticara de manera pública a Twitter (en su cuenta Twitter) por no ser lo suficientemente democrática.
En una encuesta, preguntó a sus seguidores si creían que Twitter se apegaba al principio de libertad de expresión, el cual, según sus palabras, “es esencial para que funcione una democracia“. Una vez publicada la encuesta, el empresario escribió “Las consecuencias para esta encuesta serán determinantes. Por favor, voten con cuidado“. Nadie había entendido esas palabras hasta ahora que se dio la compra.
¿De a cuánto?
De acuerdo con algunos reportes publicados (vía Bloomberg), Elon Musk desembolsó unos 2.89 mil millones de dólares para comprar ese 9 por ciento de las acciones de Twitter. Quizá ese por centaje nos parezca poco; pero en realidad, convierte al millonario sudafricano en el mayor accionista individual para la red social.
Esto no es cosa menor, pues el resto de los accionistas, al menos los que tienen un mayor de porcentaje, vienen de grupos de inversiones por parte de empresas como Vanguard and BlackRock. El hecho de que Elon Musk, de manera individual, se haya llevado esa rebanada del pastel, puede afectar de muchas formas el futuro de Twitter.
También es importante recordar que esta compra llega a unos meses (en noviembre de 2021, para ser más exactos) de que Jack Dorsey, cofundador de Twitter, renunciara como CEO de la red social entre varias controversias y suposiciones respecto a la forma en la que dirigía la empresa y hacia dónde la estaba llevando.
En el lugar de CEO quedó Parag Agrawal, a quien se le pidió que hiciera milagros en términos de crecimiento financiero (un incremento anual en sus ingresos de 7.5 mil millones de dólares) y también de usuarios (llegar a los 315 millones de usuarios para el cierre de 2023). Así que a Elon Musk le tocará trabajar de cerca con Agrawal y participar en las ambiciosas metas que tiene Twitter.