La próxima semana veremos el renacimiento de uno de los equipos de superhéroes más icónicos de los 90 con el estreno de la película de los Power Rangers.
Siendo todo un fenómeno, no hubo niño alguno que no tuviera un producto relacionado a esta franquicia. Desde juguetes, mochilas y hasta comida chatarra; los Power Rangers se encontraban en todos lados.
Obviamente, el mundo de los videojuegos no podía quedarse atrás, contando con dos títulos. Uno para el Super Nintendo y otro para el Sega Genesis.
Pero sería en 1994 cuando la popularidad de los Rangers explotaría, llegando a las salas de cine con una película:
A diferencia de la serie, esta película fue producida en su totalidad por Saban, así que las escenas de acción que veíamos en pantalla eran realizadas por actores y dobles americanos, en vez de japoneses.
Como con toda franquicia para niños, ni tarde ni perezosos empezaron a llover los productos relacionados al filme.
Entre los más recordados se encuentra el juego de Mighty Morphin Power Rangers: The Movie.
Fue aquí donde Nintendo y Sega hicieron lo posible por diferenciar sus versiones. Mientras que el juego de Super Nintendo contó con un apartado gráfico más detallado y como siempre, con mejor música; el juego de Sega contaba con un mejor modo de juego y con las voces de los protagonistas de la película.
Empecemos con la versión del Super Nintendo, que curiosamente es considerada como inferior a la de Sega. Como en la película, podremos hacer uso de uno o dos de los seis Rangers (Tommy, Rocky, Kimberly, Aisha, Billy y Adam).
Al iniciar un nivel manejaremos a los personajes sin transformar, teniendo que llenar una barra con la cual podremos utilizar un movimiento especial, o esperar a llenarla para transformarnos en su versión Ranger.
En esencia, este título es un sidescroller con la diferencia de que se lleva en dos planos diferentes. Al apretar cualquiera de los botones L o R, podremos pasar del plano frontal al trasero y viceversa.
De esta manera podremos cambiar el flujo del combate, así como evadir trampas y otros objetos.
Cada uno de los seis niveles culmina con una batalla contra uno de los villanos de la serie, con excepción del último nivel que sólo sirve como la batalla final contra Ivan Ooze.
A pesar de su impresionante apartado gráfico y música, la crítica no fue muy amable con el juego, llamándolo un clon mediocre de Final Fight, con poca variedad de movimientos y enemigos. Pero lo que tal vez sea peor es la completa ausencia del Megazord, que sólo aparece al final del juego y no es posible controlarlo.
Al menos ese mismo año salió Mighty Morphin Power Rangers: The Fighting Edition, juego de peleas que nos dejaba utilizar a los Zords de la tercera temporada y uno que otro villano de la serie.
La versión del Genesis es un Beat’em Up al mero estilo de la escuela clásica, dejándonos mover en varias direcciones en un mismo plano.
A diferencia de la versión del Super Nintendo, cada uno de los Rangers cuenta con su propio repertorio de movimientos, dándole más variedad al juego. Además, los engendros de Ivan Ooze salen como enemigos regulares junto a los Patrulleros.
Lo que realmente separa a esta versión y a los ojos de muchos la convierte en la mejor, es que aquí si podremos utilizar al Ninjazord y así recrear las típicas batallas de la serie.
Si bien su música no es la mejor, el uso de las voces de algunos de los protagonistas de la serie y la aparición de escenas de la película (en una resolución muy baja), han convertido al juego de Sega en la versión superior.
En fin, este 24 de marzo veremos el regreso de los Power Rangers. Ahora, sólo nos queda esperar el juego obligatorio que saldrá para las consolas de nueva generación. Claro, a diferencia de la primera película, sólo tendremos una versión para todas las consolas.