Finalmente esta noche podremos celebrar la Navidad, un momento muy especial para abrir regalos, aumentar entre 5 y 10 kilos con la cena estar con la familia, amigos y todos los seres queridos presentes.

Sin embargo, la magia de las festividades a veces invade las emociones de la gente, a un punto en el que se cometen errores que son como la cruda: nos dejan la moral destrozada y no queremos volver a ver la luz del día.

Hay ciertas ideas que pueden sonar como lo más genial en nuestras cabezas, pero una vez que son puestas en práctica, sólo traen catástrofe y dolor para nuestra vida. Por eso, vamos a mencionar algunas de las cosas que NO deben hacer durante estas fiestas sin importar qué tan entusiasmados se encuentren.

Nunca: llames a tu ex después de haber bebido… o antes

Lo sabemos, todo ese amor y regocijo pueden llegar a ser tan grandes, que pueden pensar que revivir la flama del amor con su ex, pero la realidad dice cosas muy diferentes. Tan sólo piénsenlo por un segundo, aquella persona que una vez fue el amor de su vida, podría estar en medio de un momento especial con su familia o peor, tal vez hasta esté en compañía de su nueva pareja.

Deben creernos cuando les decimos, que no quieren ser aquella persona de la que estén hablando después cuando su ex le diga a sus amigos: “¡Adivinen quién me marcó ayer!”

Nunca: te conviertas en el mala copa navideño

Beber y festejar es una de las cosas que todos hacemos durante estos festejos, pero eso no justifica que todos los demás tengan qué soportar a “la otra persona” que surge una vez que ya tomaron demasiado.

Nadie tiene que encargarse de una persona que escupe al hablar, se quiera ligar a media fiesta, se quiera pelear con media fiesta, necesite un terapeuta de emergencia o que quiera hacer del mundo su baño público. Puede que al otro día ni se acuerden, pero todos los demás se quedarán con las memorias de aquella Navidad el resto de sus vidas.

Nunca: te atasques de comida, y sobre todo por compromiso

Cada noche del 24 de diciembre sirve para que las madres, tías, abuelas y etcétera, compitan para quedarse con el título de la mejor cocinera. Sin embargo, eso sólo puede significar una cosa: ustedes serán los jueces.

Al principio, toda esa comida les caerá como una bendición, pero llegará un punto en que sus capacidades físicas ya no les permitan seguir metiendo alimentos a su cuerpo. No hay que seguir comiendo por convivir, sobre todo cuando saben que los espera el recalentado.

Nunca: regales calcetines

Somos totalmente conscientes de que la economía en nuestro país no macha de maravilla, pero eso no convierte a sus seres queridos en víctimas de su falta de creatividad.

Si ya invirtieron parte de su dinero en alcohol, comida y… más alcohol, entonces siempre pueden optar por pensar en un regalo que demuestre lo importantes que son sus familiares, pareja o amigos. Los calcetines son necesarios en esta vida, pero nadie los quiere como un regalo.

Nunca: hagas preguntas o comentarios que incomoden a los demás

Nadie quiere ser el Grinch que le arruine la fiesta a las personas, así que es de vital importancia no incomodar a los demás con comentarios como:

“¿Y dónde está el novio o la novia?”
“¿Para cuándo te casas?”
“Subiste de peso, ¿no?”
“¿Jamás piensas tener hijos?”
“¿Por qué invitaron a (inserten el nombre de alguien que les caiga mal)?”
“¡Te compré unos calcetines padrísimos!”

Nunca: publiques cosas de las que te puedes arrepentir en redes sociales

Aquí se puede abarcar un sin fin de cosas. Si no se cuidan, pueden terminar posteando fotos comprometedoras, poniendo comentarios feos que podrían meterlos en broncas, revelando secretos a todo el mundo y etcétera. El gran poder de usar internet, conlleva a ser una persona muy responsable.

Sabemos que muchos de ustedes aman documentar cada segundo de su vida en sus redes sociales, y está bien. Sólo hay que hacerlo con mucho cuidado.

Nunca: tomes decisiones apresuradas

La Navidad puede significar muchas cosas, y algunos pueden confundir la fecha con el momento perfecto para hacer las cosas que los tenían sin dormir durante todo el año. No es que los queramos reprimir, pero ondas como renunciar a la chamba, confesarle sus sentimientos a la pareja de alguien más, decirle a los suegros que los odian y cosas de ese estilo, no son precisamente la mejor decisión que podrán tomar en el año.

Nunca: te la pases pegado al teléfono

Ok, puede que hayan pasado toda su vida celebrando la misma fiesta cada año, pero si se ponen a ignorar a todos para sumergirse en un mundo de memes, redes sociales y videos de animalitos, entonces harán de la Navidad un día igual a otros. Si quieren que las fechas especiales conserven la magia, hay que poner un poco de voluntad.

Y así, es como llegamos al final de esta publicación, pero no sin antes decir que en Sopitas.com se les quiere, y por eso les deseamos que su Navidad patee todos los traseros posibles. ¡Sean felices hoy, mañana y siempre!

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