Uno nunca sabe qué tan valiosas pueden ser algunas cosas, sobre todo aquellas que están escondidas en el fondo de sus chácharas. Por ejemplo, hace no mucho tiempo, un granjero en Estados Unidos usaba una misteriosa piedra para detener su puerta, pero lo que no sabía es que no se trataba sólo de un adorno, sino que era un valioso objeto proveniente del espacio.
El hombre, que actualmente vive en Michigan, llevaba más de 30 años usando este objeto para que la puerta de su entrada no se cerrara. En 1980, su padre le dijo que una roca se había estrellado en la cercanía por ahí de los años 30 y que hasta la fecha nadie se había acercado a investigar. Por esa razón, ambos cavaron en el cráter hasta que obtuvieron lo que buscaban.
A pesar de que lo consideraron una especie de tesoro, nunca hicieron mucho escándalo al respecto, cosa que por décadas funcionó bastante bien. Sin embargo, el tiempo pasó y, después de que otra piedra golpeara Michigan el pasado enero, el tipo decidió valuar la suya en la Universidad Central de Michigan.
Un geólogo con buen ojo se dio cuenta del verdadero valor de esta piedra y vaya, la gran sorpresa fue que tenía un valor de hasta 100 mil dólares. Aunque no estamos 100% seguros de cómo reaccionó el granjero después de recibir tremendo notición, nos gusta pensar que casi se le cayeron los chones de emoción.
Actualmente, tanto el Smithsonian como otro museo en Maine, están pensando en comprar el preciado meteorito. Por otro lado, su dueño todavía no sabe si quiere tener esos cientos de miles de dólares o si prefiere conservar el tesoro que representa una historia familiar.
¿Ustedes qué harían?