Lo que necesitas saber:
Ver a Africa Express en vivo es una rareza y les contamos todo sobre su primera vez en la Ciudad de México.
Ver al colectivo Africa Express en vivo es una rareza. La inmensa banda liderada por Damon Albarn (Blur, Gorillaz) fue creada para hacer fiestas inmensas y rendir tributos a la música de una región en particular, pero con apenas más de una veintena de presentaciones en su historia, hoy presenciamos algo histórico en el Auditorio BB de la CDMX.
La primera presentación de Africa Express en la capital era un concierto esperadísimo, y con Damon Albarn al frente, vimos sobre el escenario a decenas de artistas de diversos países para ofrecer una experiencia sonora única. Eso sí, la sensación agridulce la provocó el recinto: el Auditorio BB no estuvo a la altura de Africa Express.
La primera presentación de Africa Express en la CDMX tuvo mucha música y una organización que no cumplió
Desde que arrancó el show, quedó claro que estábamos ante algo fuera de lo común. No recordamos que el Auditorio BB tuviera en un show a más de 50 artistas (divididos en un máximo de 20 sobre la tarima) de cuatro continentes tocando hombro con hombro, y cada rola tuvo su propio tono y algo especial.
Casi 30 rolas nos dejaron de todo, la mayoría de su nuevo disco Bahidorá (pueden checar la reseña por acá), con muchos sonidos mexicanos, y la incorporación reciente de Meme Del Real al colectivo para echarse versiones de “Eres”, “Embeces” y “Ojalá Que Llueva Café”. Completaron el lineup, entre otros, Son Rompe Pera, Bootie Brown, Mare Advertencia, Jupiter & Okwees, Seye Adelekan, La Bruja de Texcoco, Camilo Lara y Luisa Almaguer.
Meme fue quién dio la declaración de la noche sobre lo que es Africa Express: “Conozco muchos proyectos artísticos pero aquí hay un sentido de comunidad”.
Aunque escuchamos y vimos en vivo artistas impresionantes, la experiencia se vio afectada por un Auditorio BB que desde el inició advirtió en un audio que el recinto está frente a un hospital, algo que había que tomar en cuenta. Y después de dos rolas con problemas técnicos en los micrófonos, de plano sin que sonaran algunos micrófonos en el recinto, ocurrió algo que bajoneó al público y a los músicos.
En la versión de “Panic” de The Smiths, en dónde Camilo Lara expresó su preocupación por el fascismo y la ultra derecha en el mundo, el audio del recinto bajó las voces en plena rola para sobreponer un audio que decía: “LA MÚSICA SE REANUDARÁ CUANDO DEJEN DE BRINCAR, GRACIAS”. Esto extrañó al público y comenzaron rechiflas y quejas hacia los operadores del audio del recinto.
La reacción de la gente ante Africa Express
Cuando decenas de músicos arrancaron a tocar, el Auditorio BB se convirtió en pista de baile, y la verdad, creemos que el escenario y la pista se quedaron chicos. Fue imposible quedarse quietos ante lo que veíamos, el público aplaudía y gritaba entre canción y canción, celebrando cada sorpresa.
Hubo momentos verdaderamente mágicos, por ejemplo, cuando sonaron los acordes de “Eres”, el clásico de Café Tacvba, y se reveló como invitado especial Emmanuel del Real “Meme”, el Auditorio no paró de gritarle al héroe de culto nacional.
La multitud cantó a todo pulmón “Eres… lo que más quiero en este mundo, eso eres”, convirtiendo el recinto en un karaoke masivo y emotivo. Damon Albarn, con una sonrisa de oreja a oreja, se limitó al piano, y miles de voces unidas pusieron la piel chinita. Otro instante cumbre llegó con “Ojalá que llueva café”, la célebre canción de Juan Luis Guerra, interpretada en versión Africa Express: algo como en reggae, divertidísimo.
Incluso en “Panic” de The Smiths la gente respondió brincando y coreando el “cuelga al DJ!” con euforia desatada. Africa Express es una joya en el conocimiento de culto y hasta nos regalaron inesperadamente “Teardrop” de Massive Attack.
Damon, hermano, ya es mexicano
A pesar de un alejamiento notable, probablemente por las fallas de audio, algo de lo más memorable fue ver a Damon Albarn totalmente inmerso en la vibra mexicana. A estas alturas de su carrera, Damon no tenía nada que demostrar, pero tal parece que nunca terminará su curiosidad musical. Lo vimos disfrutando como un músico más del colectivo, sonriendo y alentando a sus compañeros en el escenario.
Fue un show completamente de Africa Express, sin un cover a Gorillaz o al proyecto como solista de Damon, y aunque sonó un cover de “Song 2”, la gente no pidió algo incómodo: fueron a escuchar a Africa. La conexión entre Damon y el público mexicano es innegable, y durante la interpretación de “Soledad”, un bolero donde Damon canta completamente en español, presenciamos uno de los momentos más especiales de la noche.
Con una gorra de las Chivas de Guadalajara, y tocando junto a Ricardo Muñoz, acordeonista de Intocable, Damon consolidó su fascinación por México, en un show que selló esa hermandad cultural.
Después del Bahidorá, quizás Damon ya tiene mucha conexión con nuestro país, lo demostró hablando nuestro idioma, honrando nuestra música y colaborando codo a codo con nuestros músicos, consolidados y emergentes.
El virtuosismo de un colectivo de más de 50 músicos con un disco mexicano
Si algo quedó claro en este concierto es el virtuosismo y la química de este colectivo multicultural. Sobre el escenario del Auditorio BB vimos talentos impresionantes e intensos: Mare Advertencia, Jupiter & Okwess, el rapero Bootie Brown, o los beats electrónicos de Camilo Lara (Instituto Mexicano del Sonido) que ponían sabor local.
Cada artista tuvo su momento para brillar, y Albarn, lejos de acaparar, se convirtió en casi una sombra que organizaba el relajo. Por ejemplo, Django Django aportó psicodelia indie, Moonchild Sanelly desató pasos de baile con sus inconfundibles ritmos, mientras que las mexicanas Mare Advertencia y Luisa Almaguer conmovieron con letras en español llenas de mensaje empedrador.
De los momentos más espectaculares fueron la toma del escenario por Los Pream y Son Rompe Pera, una brutalidad en ritmo e intensidad, que aunque invitaban a bailar, la pensamos dos veces después del audio anticlimático del lugar.
Escuchamos en directo rolas nuevas como “Soledad”, “Hacernos Así”, y “Defiant Ones”, maridando marimba oaxaqueña con afrobeat. También retumbaron “Mi Lado”, que puso a todos a perrear con su base de reggaetón fusión, y “Otim Hop”, una demencia electro-tribal ugandesa que convirtió el Auditorio en rave por unos minutos.
Al final, con todos los músicos abrazados en fila saludando al público, se sentía en el aire que habíamos presenciado una noche atípica y sorpresiva. Fueron más de dos horas en las que Damon Albarn y compañía nos llevaron de paseo por el mundo sin salir de la CDMX, con un mensaje humano en tiempos de división.
La presencia de Africa Express en México, primero en Cervantino y ahora en la CDMX, ha sido un evento histórico, como lo dijo Eme MalaFe, que celebra como nunca la diversidad de géneros en algo que quién sabe cuándo podamos ver de nuevo. Esperemos que sea en un lugar ideal para Africa Express.
