Dentro de la camada de bandas británicas que surgieron en los “dosmiles”, llamaron la atención agrupaciones como Two Door Cinema Club, Bloc Party, Editors, The Maccabees, Wild Beasts y por supuesto, Foals. Aunque algunas ya están extintas, sin embargo, los liderados por Yannis Philippakis no quitaron el dedo del renglón. En una parte esto se debió al gran amor de su público y a las peticiones de millones de verlos una y otra vez en vivo, pero en otra gran parte fue porque Foals es una banda que se mantiene evolucionando conforme el tiempo determine.
Tras haber pasado casi cuatro años desde la salida de What Went Down, haber permanecido fuera de escenarios por casi un año y luego de la partida de su bajista, Walter Gervers, los británicos anunciaron su regreso -uno muy esperado- este 2019 y no solo eso, sino que llegarán por primera vez con un doble álbum bajo el nombre de Everything Not Saved Will Be Lost.
Sobre el tema y aquellas cosas relevantes que nos hicieron enamorarnos Foals y de su poderoso math rock, platicamos con Jack Bevan, baterista de la agrupación y el encargado de hacer que nuestro ritmo cardiaco vaya siempre de menos a más y de regreso, pero quien también recordó aquellas épocas en las que la banda tocaba en casas y apareció en Skins, una serie de Channel 4 que se convirtió en el estandarte de la juventud irreverente, irresponsable, de las drogas, alcohol, sexo, delincuencia y fiesta. Historias que estaban entrelazadas y que representaban a una juventud sin freno, con presiones y problemas de su tiempo.
“Es increíble retroceder en el tiempo y ver cómo eso (Skins) influyó en la cultura juvenil. Creo que incluso eso nos ayudó a ganar popularidad. […]Tocábamos en cualquier casa. Éramos muy jóvenes, quizá no pensábamos bien las cosas o no las planeábamos bien. La gente bailaba, había dj’s… Creo que nuestro crecimiento fue progresivo. Creo que fuimos escalando con cada producción y ahora es increíble que la gente escuche nuestra música alrededor del mundo. Creo que todo fue natural y muy orgánico. Estoy agradecido por cómo se dieron las cosas“.
En cuanto a su nuevo material de estudio, Jack tuvo mucho que decir. Y es que fue una larga transición que les hizo tomar caminos distintos a lo esperado: “Creo que pasó más tiempo porque decidimos esperar. Quedamos algo cansados luego de What Went Down y no nos habíamos dado un break. Pensamos que necesitábamos ese tiempo, ya sabes, para seguir con nuestra vida normal. Además, queríamos usar el tiempo para poder hacer algo más orgánico, no más rápido”.
La salida de un doble álbum ha dejado a todos sorprendidos. No es fácil aventarse una tarea x2 y hacer que cada una tenga su propio papel sin opacar a la otra. Sin embargo, Jack asegura que ese no fue un obstáculo, ya que una vez que se adentraron en el estudio sabían que tendrían que volverse los más meticulosos con cada detalle.
“Los hicimos al mismo tiempo y de alguna manera se complementan el uno al otro pero cada uno tiene sus particularidades. Fuimos muy cuidadosos de que ambos discos tuvieran la misma calidad canción por canción“.
Al mismo tiempo que Foals trabajaba en una dualidad discográfica que funcionara de manera dinámica, también tuvieron que enfrentarse al hecho de que ahora ya no eran cinco, sino cuatro, puesto que Gervers dijo adiós a la banda en enero de 2018, justo el momento en el que los británicos se encontraban a un paso de la transición de What Went Down a Everything Not Saved Will Be Lost.
“Tuvimos que encontrar una nueva dinámica como banda. Llevábamos 10 años haciendo esto con cinco personas. Son embargo tuvimos que acostumbrarnos a algo nuevo, aunque eso también ayudó a encontrar otro sentido en la música”.
En algún momento, Yannis había comentado que el próximo doble disco tendría un tono quizá un tanto político y sobre ello, Jack comentó que si bien nunca llevarán a cabo un material completamente de izquierda, de derecha… de arriba o abajo, sí era necesario abordar temas puntuales que agobian a la sociedad de hoy en día.
“No creo que intentáramos hacer un álbum 100 por ciento político, pero creo que era imposible ignorar cosas que estaban sucediendo. De estar consciente de lo que está pasando alrededor del mundo. La gente está paralizada y eso era algo de lo que Yannis trataba de hablar. Se sentía colmado. Este disco simplemente trata sobre lo que significa estar vivo y de todo lo que sucede a tu alrededor“.
Este discurso, uno preocupado tanto por los miembros de su banda como por el mundo entero, un discurso tan lleno de madurez, viene luego de poco más de 10 años de crecimiento. Foals pasó de ser la banda que hacía toquines en hogares de Manchester para pisar los escenarios de los festivales más importantes del mundo y volver locos a los fans. Pasó de aparecer en la serie de culto Skins a ser una agrupación pionera del math rock en el 2000.
Recuerda que Foals se presentará en la próxima edición del Vive Latino. ¡POR ACÁ ENCUENTRAS TUS BOLETOS!