Siddhartha anda de estreno por el lanzamiento de su nuevo disco, pero además también inaugura una nueva etapa en su carrera, ya que para el lanzamiento de Únicos trabajó ahora junto a una disquera trasnacional, la cual le ayudó a potencializar sus recursos pero demás, respetó sus ideas por lo que tuvo la oportunidad de grabar en Nueva York y trabajar con e productor Didi Gutman.
Para la presentación de Únicos, Siddhartha tendrá un magno concierto el próximo 7 de noviembre en el Plaza, y tomando como pretexto el show y su disco, platicamos con é en donde nos contó como fue el proceso de grabación, la etapa de transición que vive su carrera, y cómo la gente no deja de relacionarlo con Zoé a pesar de que su paso por la banda fue fugaz.
Sopitas.com: Siddhartha, para ti, ¿qué es algo único?
Siddhartha: Que somos irrepetibles, que todas las personas aunque seamos de la misma especie y raza, cada persona tiene algo que lo diferencia de la otra, y no sólo las personas sino los momentos, las canciones, no hay nada en este mundo que sea exactamente idéntico a otro, ni siquiera unos gemelos. De eso trata el disco, y por eso me gustaba como titulo, porque tanto las canciones, como las temáticas en las que se basó, habla un poco de eso.
S: Musicalmente hablando, ¿cuál fue el reto más difícil al que te enfrentaste al grabar este disco?
Siddhartha: Fíjate no fue a la hora de hacerlo sino previo a hacerlo. Antes de sacar un disco siempre hay hacia ti mismo una expectativa de pensar ‘bueno y ahora qué sigue, qué voy a hacer, de qué voy a hablar, cuál va a ser el título, con quién voy a trabajar’, todas estas interrogantes antes de realizarlo. Y resultó todo lo opuesto, en cuanto me senté a componer todo fluyó, toda esa energía creativa que tenía acumulada a lo largo de estos 3 años de no haber estado en un estudio, trajo un montón de cosas frescas para mí.
El mayor reto era el hecho de compartir el crédito de productor con una persona externa, con Didi Gutman, porque es la primera vez que comparto este rol con alguien más. Siempre había producido yo mis discos y era algo que yo tenia en mi cabeza, abrir mi espacio para la participación de alguien que también me diera otro feedback y otra perspectiva y por suerte encontré a la persona adecuada, alguien que entendía muy bien lo que yo quería musicalmente, que complementó lo que había que hacerlo, y las cosas que estaban bien logradas desde antes, también fue muy respetuoso y no las cambió.
S: Cambiaste de disquera, te fuiste a Nueva York, entraron nuevos colaboradores ¿Cómo le hiciste para no perderte entre tantos lugares y personas a la hora de grabar este disco?
Siddhartha: Estas cosas se van descubriendo un poco con base en la prueba y el error, y en el momento de tomar las decisiones fue clave. Cuando llegó a haber algo que no me dejaba satisfecho, lo frenaba desde el momento uno, no me esperaba a que esta insatisfacción creciera y que después tuviera como una piedra en el zapato. Con toda mi obra y mis discos siempre he quedado satisfecho, al final son cosas que yo hice, pero siempre pasa que hay algo que a través del tiempo escuchas o cuando terminas el disco dices ‘híjole, me faltó un poco de tiempo para en tal tema, en tal parte haber hecho esto, en vez de esto otro’.
También desde que comencé a componer muy rápido salieron las canciones, la mayoría de las letras ni siquiera las escribí porque, usualmente uso lápiz y papel y me pongo a escribir, tacho, borro y corrijo, pero esta vez simplemente ponía a grabarme lo que cantaba de manera instintiva e improvisada, eso era lo que se quedó. Terminaba muchas de las letras y era como un discurso cantado que le dio mucha naturalidad, siento que haberlo tomado con esa ligereza le dio frescura y me entusiasmó. Fue un disco en donde todo el proceso se disfrutó, y eso hizo que el resultado fuera como lo pensé, aunque en realidad no lo pensé tanto (risas).
S: ¿Cuáles son las mayores diferencias que encontraste entre trabajar de forma independiente y con una disquera trasnacional?
Siddhartha: Las diferencias han sido sólo positivas hasta el momento, la mayor es que ahora hay cosas que puedo imaginar y que son más fáciles de llevar a la práctica. En el camino a la independencia si bien lo pasé increíble y no me quedé con ningún mal sabor de boca ni nada, sí había ciertas cosas que estaban fuera de mi alcance. Por ejemplo ir a grabar a Nueva York, se hace más complicado costear todo esto con tus propios recursos y esperar a que pase equis cantidad de tiempo para ver el resultado. El trato que tengo con la disquera desde un principio fue súper positivo, porque ellos entendieron muy bien la naturaleza de mi proyecto y nunca llegar a modificar nada, mas bien a este camino que ya llevábamos recorrido, respetar la dirección en la que íbamos y sumarle al proyecto. Siento que estoy trabajando en la independencia, pero con un equipo de trabajo mas grande que me ayuda a materializar las ideas más fácilmente, de ahí no he sentido cambios más que a favor.
S: ¿Y cómo es la vida de un músico independiente en México? ¿Siempre hay pruebas difíciles?
Siddhartha: No soy muy quejumbroso y no tengo una cosa que te diga ‘esto me hizo padecer, me sacó canas’, pero creo que un poco la burocracia y este tema de la industria en la que hay que ser un RP de tu propio proyecto, cosa que no se me da y no disfruto. El hecho de estar convenciendo gente, y hacer cosas que no tienen que ver con la música, sino con caerle bien a alguien, o con estar presente en una fiesta. De repente así se consiguen cosas, y hasta vale mucho más de quién eres amigo que si tienes una buena canción, y esta parte es la que más flojera me ha dado, la que nunca cultivé. Son cosas como esta faceta que deben de tener los músicos, de andar lambisconeando y yo no ceder a ello (risas).
La otra, es abrirme camino con mis propios medios y quitarme el estigma de la gente del ex baterista de Zoé, que en realidad es una cosa rara que pasó porque fue muy poco tiempo y demasiado fugaz, pero pareciera que lo hice toda mi vida, cuando en realidad fue una etapa corta y es raro que todavía la gente lo relacione. Por ejemplo, mi primer álbum lo compuse mucho antes de participar con Zoé, luego salió y alguien dijo ‘estuvo con Zoé, ah entonces se parece, es que se le nota la influencia’, cuando en realidad antes de participar con ellos, yo ya tenía estas composiciones hechas y si bien había estado con Zoé, no hubo algo que usara como una referencia.
S: ¿Tuviste que trabajar mucho para trasladar las canciones del disco a su versión en vivo?
Siddhartha: Más o menos, tiene su complejidad el concierto solista, porque con una banda primero ensayan las canciones, las crean, y las graban, acá es al revés. Primero hago las canciones, las grabo y luego en la etapa final cuando vas y las tocas en vivo, hay que sacarlas con la banda, pero este disco creo que está muy pensado en una alineación en vivo, es decir que es más minimalista en cuanto a instrumentación se refiere. En discos anteriores había 200 canales y capas de mil cosas, y en este disco quería al estarlas montando en vivo se ha facilitado el trabajo. En general, es un disco mucho más dócil que el primero para tocar en vivo, porque el primero cuando lo grabé nunca pensé que lo iba a tocar en vivo, por lo que a la hora de acomodar mi voz era muy complicado a la hora de hacerlo en vivo, y con base en la experiencia todo lo analice para que al llevarlo a la práctica, fuera más amigable.
S: Durante mucho tiempo diste clases de música ¿Qué fue lo más gratificante para ti al compartir tus conocimientos con otras personas?
Siddhartha: Lo más gratificante es que pasaron por mi clase gente con la que ahora trabajo, que son mis amigos, continuaron con la música y son exitosos en ella. Por ejemplo Caloncho fue mi alumno, Abraham baterista de Technicolors Fabrics, La Chata baterista de Porter, Orlando de los Clubz, y es eso, que de alguna manera, saber que aporté algo para su desarrollo.