“Basta con escuchar el sonido de alguna alarma, leer en la web o en redes sociales noticias con respecto a un próximo terremoto de igual o mayor magnitud a los vividos en 1985 y 2017, para revivir la sensación de angustia que provocaron“, así la introducción que la UNAM nos da sobre el estrés que le produce a muchos mexicanos y mexicanas fechas de sismos pasados.
Sobre todo cuando la fecha en la que recordamos a las víctimas de los sismos y la realización de los simulacros se acerca.
Sin embargo, mucho de este miedo y estrés se debe al tipo de noticias que se difunden.
Estrés y ansiedad
“La fecha como tal va a ser un efecto estresor sobre la población. Este tipo de notas lo que detona es una ansiedad exacerbada y un sentimiento de incertidumbre que se acompaña de sintomatologías como insomnio y estrés”, explicó Francisco Martínez León, académico del Centro Comunitario Dr. Julián Mac Gregor Sánchez y Navarro, al hablar de esas fake news que suelen difundirse por cadenas en WhatsApp o personajes que dicen predecir el futuro y sus desastres.
Además de crear una atmósfera de incertidumbre, también llevan a la gente a que piense “demasiado en el evento y contagiar la emoción”.
¿El resultado?
Que la gente esté pendiente de un próximo sismo, que es imposible de predecir aunque México se encuentre en el Cinturón de Fuego del Pacífico.
Es seguro que en algún momento te hayas encontrado con una cadena que alerta sobre un próximo sismo o tal vez recuerdes que días después de los sismos del 7 y 19 de septiembre comenzó a difundirse información sobre un movimiento de mayor magnitud, lo que puso en alerta a la ciudadanía que ya se encontraba impactada por los sucesos.
¡Atención! NADIE puede predecir un terremoto.
La alerta que la ONU predijo otro fuerte temblor en México es FALSA.
¡No la propagues! pic.twitter.com/ZxOXtfXRsu— ONU Noticias México (@CINUmexico) September 20, 2017
Ante la proliferación de estos mensajes, Protección Civil, medios de comunicación y asociaciones civiles se encargaron de desmentir la información y aclarar los procedimientos de monitoreo, más NO de predicción.
Según el académico de la UNAM es importante tomar en cuenta la diferencia que hay entre nuestras emociones en nuestros días cotidianos y las que se vivirán en estas fechas, todo derivado de la información que se comparte y la fecha por sí misma:
“El estrés es, hasta cierto grado natural, sin embargo, el estrés postraumático es aquel que daña las partes sociales, laborales y familiares de alguien”.
La recomendación es informarnos con fuentes veraces y tener en claro que los sismos NO pueden predecirse, pero lo se puede hacer es adquirir conocimientos de protección civil y protocolos de actuación ante un sismo.
El #19S, una fecha estresante. #UNAMglobal > https://t.co/A9UfD3dCQL pic.twitter.com/aULmnIpLaw
— UNAM (@UNAM_MX) September 17, 2018
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**Foto de portada: PulsoDF.