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La cifra de muertes que dejó el ataque suicida a musulmanes chiies en Kabul, ha aumentado a al menos 80 muertos y se espera que siga en aumento.
Durante una manifestación pacífica que se estaba desarrollando en Kabul, capital de Afganistán, se presentó un ataque suicida que ha dejado al menos 61 muertos y más de 200 heridos. Así lo confirmó el Ministro de Salud Pública de ese país a EFE.
A través de la Agencia Amaq, Daesh se adjudicó el atentado, e informaron que fueron dos militares yihadistas los que detonaron sus cinturones en una concentración de chiies en la zona de Dehmazang.
Las víctimas pertenecían a la minoría étnica hazara, musulmanes chiitas, que realizaban una manifestación en la plaza Deh Mazang para protestar porque la nueva línea eléctrica que construyó el gobierno no pasa por las provincias en las que muchos de ellos viven.
El presidente afgano Ashraf Ghani ya se pronunció en contra del ataque, así como la organización el Talibán, que a través de su portavoz Zabiullah Mujaheed comunicó a los medios que el grupo no está detrás del atentado.
De acuerdo con información de la agencia Reuters, los talibanes niegan responsabilidad sobre el atentado terrorista en Kabul. Su vocero, Zabihullah Mujahid, señaló que su movimiento “no tuvo nada que ver en este ataque trágico”.
Mujahid dijo que el atentado, que afectó una manifestación de miles de hazaras chiíes, una minoría étnica , fue perpetrada por “círculos enemigos”.
Pres.@AshrafGhani is deeply grieved by the explosions among protestors today in #Kabul. pic.twitter.com/K5UqvrKMwS
— ارگ (@ARG_AFG) 23 de julio de 2016