El terremoto de 7’5 grados que se produjo ayer en la zona oeste de Guatemala tuvo consecuencias devastadoras. De momento, el número de fallecidos asciende a 52, mientras que 22 personas continúan desaparecidas. Según el presidente del país, Otto Pérez Molina, el núméro de muertos podría aumentar.
Pérez Molina informó en su cuenta de Twitter que Guatemala recibirá ayuda humanitaria de países como México, una ayuda muy necesaria porque, en estos momentos, el número de damnificados por el sismo es de 5251, mientras que 762 personas están en albergues. Además, más de 2.200 viviendas se vieron afectadas según los primeros datos oficiales.
Las zonas más afectadas siguen siendo los departamentos de San Marcos, Quetzaltenango, Quiché y Huehuetenango. El Presidente de Guatemala decretó el Estado de Calamidad (casos en los que la ciudadanía puede estar en peligro como consecuencia de desastres naturales, epidemias o guerras) para esos lugares por 30 días, y Duelo Nacional de 3 días. Otto Pérez Molina agradeció la ayuda de la población guatemalteca e inició la visita a los lugares más destruídos.