La conocida como “crisis migratoria” en Europa arrancó en todo su esplendor en 2015. Ahora, tres años después, las consecuencias políticas, sociales y la búsqueda de soluciones siguen a mil por hora. Esta vez, la Unión Europea está ofreciéndole 6 mil euros a todos los países por cada migrante que acepten en “Centros de Seguridad” en su territorio.
A través de la Comisión Europea —algo así como el Poder Ejecutivo de la UE—, Bruselas busca quitarle presión a los gobiernos de los países que andan dando ‘un paso a la derecha’ en sus políticas migratorias. Estos Centros de Seguridad tienen la intención de procesar con efectividad y orden las solicitudes de asilo que llegan por montones a las oficinas europeas.
European commission plans to pay £6,000 per person in bid to control Mediterranean crossings European Union countries could be offered €6,000 (£5,346) per person to host migrants in secure centres on their territory, as the #EU searches for a po… https://t.co/7Wm2wD6qXt #EUpol pic.twitter.com/H8HP3iFXxh
— EUwatch 🇪🇺 (@EUwatchers) 24 de julio de 2018
La propuesta es abierta, pero al que la Unión Europea más quiere convencer o al menos pedirle que le baje dos rayitas es Italia. Desde que Matteo Salvini, el controvertido vicepresidente, llegó al ministerio del interior hace dos meses, el país de la pasta y la pizza ha dejado de permitir que lleguen migrantes a sus puertos y las políticas anti-migrantes están a la orden del día.
El lado bueno es que este acercamiento con propuestas concretas comienza a tener avances.
Entre las primeras victorias de esta medida está que el gobierno italiano ya aceptó permitir que los botes con migrantes se queden al menos cinco semanas en lo que se organiza una solución. Eso sí, Matteo Salvini no está muy convencido por todo el enredo: “Si quieren dar dinero, que se lo den a alguien más. No estamos pidiendo dinero, pedíamos dignidad y la estamos recogiendo con nuestras propias manos”.
La propuesta de la Unión Europea busca repartir mejor los gastos de la migración, que por el momento sí recaen fuertemente entre los países del Mediterráneo.
De acuerdo a la propuesta, los Centros de Seguridad consisten de docenas de guardias, intérpretes y expertos abogados que ayudarán a los migrantes a facilitar el proceso. Una vez que han llegado a territorio europeo, su meta es terminar todos los procesos en menos de 72 horas.
El próximo 30 de julio, los embajadores de la Unión Europea se reunirán en Genova para ponerle los puntos finales a la propuesta y así “arrancar los antes posible con el programa piloto”.